Al menos una persona ha muerto y otras siete han resultado heridas este domingo tras un tiroteo durante un festival del Día de los Caídos en Guerras, en Oklahoma, Estados Unidos.
La persona fallecida es una mujer de 39 años y los siete heridos de edades comprendidas entre los nueve y los 56 años, tienen un pronóstico moderado. Un menor, de nueve años, se encuentra entre los heridos, según han informado las autoridades, tal y como ha recogido ‘ABC News’.
Alrededor de 1.500 personas se encontraban en el festival en Taft (Oklahoma), a unos 45 kilómetros al sureste de Tulsa, cuando se ha producido el tiroteo, según un comunicado de la Oficina de Investigación del estado de Oklahoma.
Los testigos han asegurado a los investigadores que los disparos se han producido después de una discusión.
El principal sospechoso, Skyler Buckner, de 26 años, se ha entregado en la oficina de Policía del condado de Muskogee a las 16.05 horas (hora local) de este domingo.
Recientemente, las armas de fuego superaron a los accidentes de automóvil como principal causa de muerte entre los menores estadounidenses con datos oficiales que muestran un fuerte incremento de asesinatos con armas como la masacre en una escuela de Texas que se cobró la vida de 19 niños.
En términos generales 4.368 niños y adolescentes de hasta 19 años murieron por causa de disparos en 2020; una tasa de 5,4 cada 100.0000, según datos del de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Casi dos tercios de las muertes fueron homicidios.
En comparación, hubo 4.036 muertes relacionadas con vehículos; anteriormente la principal causa de muerte en ese grupo etario.
La brecha se fue cerrando desde que en las últimas décadas se mejoraron las medidas de seguridad en el tránsito mientras que las muertes por armas fueron creciendo.
Las líneas de tendencia se cruzaron en 2020, último año del que se disponen datos; un hallazgo encontrado en una carta publicada la semana pasada en la revista New England Journal of Medicine (NEJM).
Los autores de la carta advirtieron que los nuevos datos eran consistentes con otras evidencias de que la violencia con armas aumentó durante la pandemia de covid por razones que aún no están totalmente claras. Advirtieron empero que “no puede suponerse que se revertirá a los niveles pre-pandemia”.
Los datos actualizados de los CDC muestran que casi 30% de las muertes fueron suicidios, apenas 3% fueron decesos no intencionados y 2% corresponden a intentos no esclarecidos.