El Ministro de Trabajo, Rolando Castro, destacó la dura realidad que enfrentan muchas familias que viven de la extracción del curil, una actividad que define su sustento diario.
“Ellas son personas que viven del manglar, de la extracción del curil. A veces ganan dos, tres o cuatro dólares, depende de qué tan bien la marea lo permita”, explicó Castro, al describir las difíciles condiciones económicas de estas comunidades.
El Ministro también señaló una problemática intergeneracional profundamente arraigada: “Cuando fueron niños no tuvieron la oportunidad de estudiar. Hoy sus hijos y nietas repiten su historia. Hay niñas y niños en los manglares trabajando, cuando en realidad deberían estar jugando y estudiando”.
Con un llamado a la acción, Castro enfatizó la urgencia de intervenir para cambiar este ciclo de pobreza y trabajo infantil. “Debemos sacar a esos niños y llevarlos a la escuela. Trabajemos todos y erradiquemos el trabajo infantil. Los niños deben ser niños”, expresó con firmeza.
El Ministerio de Trabajo anunció que intensificará los esfuerzos para promover programas de apoyo social, educación y oportunidades laborales para los adultos en estas comunidades, con el objetivo de reducir la necesidad de que los menores participen en actividades laborales.
La erradicación del trabajo infantil es uno de los pilares fundamentales en las políticas laborales impulsadas por el Gobierno, como parte de los compromisos internacionales de respeto a los derechos de los niños y niñas.
