Esta vez no se calzó el traje de superhéroe. Lionel Messi estuvo a tono con el desempeño general del Barcelona y no pudo evitar la derrota de su equipo en el clásico ante Real Madrid. A raíz de un video que circuló en la previa del encuentro, se desató el interrogante: ¿el astro rosarino jugó lesionado?
Las imágenes que despertaron la preocupación fueron las de la llegada del plantel Blaugrana al estadio Santiago Bernabeu en las que a Messi se lo vio rengueando levemente. Desde el cuerpo médico del equipo no hubo comunicación oficial respecto de si arrastraba alguna tipo de lesión.
La realidad es que se trataba de un partido clave y Messi no podía estar ausente. Desde el comienzo, el rosarino y sus compañeros del conjunto blaugrana sintieron el rigor. Al salir al campo de juego del estadio Santiago Bernabeu para hacer el calentamiento previo, los fanáticos del conjunto local les propinaron una fuerte silbatina.
Acostumbrado a este tipo de gestos, la Pulga ni se inmutó.
Los 90 minutos de juego resultaron adversos para Messi en todo sentido. No solo estuvo lejos de habitual nivel, sino que no pudo encontrarse cómodo en su lugar en la cancha. Tampoco estuvo fino dentro del área y falló en las dos oportunidades que se le presentaron. La primera fue a los 37 minutos del primer tiempo: tras un gran pase de Sergi Busquets, se escapó de su marca y sacó un remate que se encontró con la buena cobertura del arquero Thibaut Courtois. La segunda fue recién a los 29 minutos de la segunda parte cuando encaró hacia el arco, pero entre Marcelo y Raphael Varane lograron robarle la pelota en el momento justo.
Como la pelota no le llegaba, el argentino se vio obligado a retroceder en el campo de juego. Por momentos, pareció jugar en posición de mediocampista central. En la segunda parte, en tanto, colaboró activamente en la marca y recuperó algunas pelotas. Por ese rol que debió asumir de manera forzada vio la tarjeta amarilla. Fue a los 85′, por una falta desde atrás sobre Casemiro. Cuando el árbitro Antonio Mateu Laoz pitó el final del encuentro, decretando así el triunfo del Real Madrid por 2-0, Messi mostró en su rostro el fastidio. Se retiró con gesto adusto y se fue directo al vestuario.
Ante Real Madrid, Messi raspó más de lo que jugó. No supo encontrar su mejor versión y se encendieron las alarmas sobre su estado físico. Habrá que aguardar hasta la vuelta a los entrenamientos del Barcelona para conocer la verdad sobre su condición. El próximo partido del conjunto catalán será el sábado ante la Real Sociedad por la fecha 27° de la Liga.