En cada evento que organiza, Gianni Infantino, presidente de la FIFA (Federación Internacional de Fútbol Asociación), intenta despuntar el vicio y juega un partido de fútbol junto a distintas personalidades y ex estrellas de este deporte.
En esta oportunidad las redes sociales le jugaron una mala pasada, ya que se volvió viral la defectuosa ejecución de un tiro de esquina en el marco de una clínica de fútbol en París, Francia.
El dirigente italo suizo se mostró algo torpe y tosco a la hora de conectar el balón en un córner. Tras una extensa carrera, Infantino le dio de puntín y con muy poca precisión. Su envío no estuvo ni cerca de pasar por el área rival y terminó detrás del arco.
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El mandatario, que preside el organismo desde 2016 y que fue reelegido este miércoles hasta 2023, tomó la palabra en el segundo y último día de la primera Convención de la FIFA sobre el fútbol femenino y destacó el desarrollo de la actividad desde que asumió en el cargo. «Tengo cuatro hijas, la presión en casa para que haga algo en favor del fútbol femenino es muy alta. No soy para nada objetivo pero, bromas aparte, es una prioridad para la FIFA», esbozó.
También subrayó que el fútbol femenino debe tener una identidad propia y no ser un «copia y pega» del masculino. «El fútbol femenino y las mujeres en el fútbol necesitan igualdad. Necesitan actos, no palabras. Las discriminaciones deben ser abordadas», añadió el presidente en las horas previas al inicio del Mundial de Francia, por el que auguró una audiencia global de 1.000 millones de personas.
«Hoy nadie habla de crisis, de reconstruir la FIFA desde cero. Nadie habla de escándalos, de corrupción, hablamos de fútbol. Creo que lo menos que podemos decir es que hemos dado la vuelta a la situación», añadió ante los delegados de las 211 federaciones integrantes.
