El Udinese tomó una medida ejemplar y sin precedentes en el fútbol italiano al sancionar de por vida a un aficionado que profirió insultos racistas contra el arquero del AC Milan, Mike Maignan, el pasado 20 de enero en el duelo correspondiente a la fecha 21 de la Serie A disputado en el estadio Blueenergy y que ganó el equipo Rossonero por 3 a 2. Además, las autoridades del Calcio determinaron este martes que el equipo de la ciudad de Údine jugará su próximo encuentro como local a puertas cerradas como consecuencia al acto discriminatorio de su parcialidad.
“El juez deportivo decidió sancionar al Udinese con un partido a puerta cerrada teniendo en cuenta el informe del árbitro, así como el informe de los representantes de la fiscalía federal, con respecto a los actos de discriminación racial en varias ocasiones durante al partido del sábado”, explicó la Serie A en un comunicado.
Respecto a la sanción al individuo que lanzó los degradantes insultos hacia el arquero francés, el club italiano pudo identificar al agresor y de inmediato le aplicó un castigo que sentará un precedente histórico. “Esta persona se enfrentará a una prohibición de por vida de asistir a cualquier partido del Udinese Calcio. Esta prohibición entra en vigor inmediatamente”, informaron desde la institución italiana en un comunicado oficial.
Maignan, arquero del Milan, fue objeto de gritos de mono en el duelo ante Udinese. Después de haber alertado al árbitro del partido en un primer momento, el francés abandonó el terreno de juego en el minuto 34, imitado por sus compañeros, antes de que el partido se reanudase y concluyese con victoria de la visita (3-2). Al día siguiente, el arquero expuso la responsabilidad del fútbol italiano en estos incidentes. “Si no hacen nada, también son cómplices”, escribió en un mensaje en redes sociales.