«Ficharía a Neymar, sin duda». En uno de los avances de la entrevista que Mundo Deportivo publica en papel este domingo, el ex presidente del Barcelona vota por el regreso del brasileño al Barça con la paradoja de que fue su fichaje el que precipitó su dimisión como presidente del club azulgrana por la opacidad de las cifras de su fichaje.
Rosell siempre consideró el gran éxito de su mandato el fichaje de Neymar, a quien consideraba el sucesor de Messi en una opinión que, curiosamente, compartió incluso el argentino, que llegó a pedir a Neymar que no se fuese del Barça. «Te haré Balón de Oro», llegó a decirle Messi a Neymar durante la gira por Estados Unidos en 2017 para intentar convencerle de que no se marchase.
Sandro Rosell acabaría dimitiendo el 23 de enero del 2014 como presidente del Barça “cansado y enfadado”. Un socio del Barça, Jordi Cases, interpuso contra Sandro Rosell una querella criminal por apropiación indebida a causa de la «distracción de 40 millones de euros correspondientes al fichaje de Neymar». El Barça acabó admitiendo un delito.
En el acuerdo, que implicaba el reconocimiento del club de un error en la planificación de la fiscalidad del fichaje en los ejercicios de 2011 y 2013, se exoneró de delito al expresidente Sandro Rosell y al propio Bartomeu. El Fiscal de la Audiencia Nacional reclamaba al conjunto de los implicados más de 62 millones de euros. En el pacto con la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya y la Abogacía del Estado se exoneró a los presidentes de su gestión y se exigió al club que asuma los dos delitos fiscales por los que pagará 15 millones que incluyen las cuotas defraudadas y la multa, aceptada en el pacto, de 5,5 millones.