La espera se terminó para los amantes del tenis. Rafael Nadal volvió a jugar tras una larga inactividad de 349 días y logró un contundente triunfo en su regreso al circuito profesional: venció al austríaco Dominic Thiem por 7-5 y 6-1 en la ronda 32 del ATP 250 de Brisbane y avanzó en el torneo que servirá como preparación para lo que será el Abierto de Australia, primer Grand Slam de la temporada 2024.
Ya desde su ingreso a la cancha en el Pat Rafter Arena, el público no ocultó su fascinación por volver a ver al ganador de 22 títulos de Grand Slams. Ni bien ingresó al estadio, todos los presentes dispusieron de las cámaras de sus teléfonos celulares para inmortalizar la vuelta del mallorquín al tenis de primer nivel. Ni bien ingresó al recinto, Nadal esbozó una sonrisa mientras miraba las tribunas.
Una vez que se dirigió a su banco, el público cercano al lugar sólo atinó a registrar otro momento único con sus dispositivos, mientras el español comenzó su ritual en la previa del encuentro ante Thiem. En un primer set parejo, la diferencia en favor de Rafa llegó en el juego número 12: con la ventaja 40-30 con el austríaco al servicio, Nadal aprovechó su cuarto punto de quiebre para quedarse con el primer parcial por 7-5.
Pero antes de eso, fueron varias las jugadas en las que mostró su sello. Una de ellas fue con un golpe a pura muñeca con su zurda que hizo delirar a los fanáticos cuando el duelo estaba 1-1. Acto seguido, otro destello de su juego inoxidable dejó uno de los momentos más destacados en su regreso al tenis desde el pasado 18 de enero de 2023, cuando por la segunda ronda del Abierto de Australia, perdió con el estadounidense Mackenzie McDonald por 6-4, 6-4 y 7-5.
Con el saque a favor, y después de un ida y vuelta, Nadal devolvió un globo alto de Thiem y definió cerca de la red con un toque que provocó un grito de furia de parte del español para festejar un punto de lujo.
Tras la victoria en la primera manga, el segundo set fue muy favorable para el tenista de 37 años y que acumula 92 títulos individuales en su gloriosa carrera. Se quedó con la victoria en el parcial por un contundente 6-1 para avanzar de ronda en Brisbane. “Gracias por el apoyo. Hoy era un día muy emocionante y especial para mí”, dijo Nadal ni bien terminó en su regreso al circuito profesional después de casi un año de inactividad por una persistente lesión en el psoas ilíaco de su pierna izquierda lo obligó a tener que alejarse de la actividad para lograr una recuperación que le permita volver a jugar.
“Estoy contento por el nivel mostrado en este primer partido. Estoy orgulloso de mí y del equipo después de todo lo que he pasado. Estuve soñando con este día mientras el tiempo que estuve afuera”, agregó el mallorquín, que con su triunfo en el torneo de la ciudad australiana logró el hito de posicionarse como el cuarto tenista en la historia con más triunfos en singles con 1069, dejando detrás a la leyenda Ivan Lendl. La lista la encabeza Jimmy Connors con 1274 victorias y Novak Djokovic está tercero (1088 y contando).
A principios de diciembre, Nadal publicó un video en diferentes partes en las que abrió su corazón y habló de cómo esperaba su vuelta al tenis. “Tengo y he tenido miedo de anunciar las cosas porque, al final, es un año sin competir. Es una operación de cadera, pero lo que más me preocupa no es la cadera, sino todo lo demás. La realidad es que es mucho tiempo y uno tiene dudas sobre su cuerpo. Pero bueno, creo que estoy preparado y confío y espero que las cosas vayan bien y que me dé la oportunidad de disfrutar en la pista otra vez”, dijo Rafa en la primera parte del video.
Acto seguido, dejó en claro lo que será su pensamiento tras una larga etapa fuera de las canchas. “Al final, es mucho tiempo. Espero, lo primero, sentir otra vez esos nervios. Esa ilusión, esos miedos, esas dudas. Espero de mí no esperar nada, esta es la verdad. Tener la capacidad de no exigirme lo que me he exigido toda mi carrera”, agregó Nadal en la publicación.