El Liverpool y el Manchester City animaron un partido digno de dos aspirantes al título en la Premier League: terminaron empatando 1-1, gracias a los goles de John Stones y Alexis Mac Allister de penal. Además de dinámica, ritmo, fútbol bien jugado e ida y vuelta, el cotejo incluyó la polémica, por el penal de Doku al argentino que reclamaron los Reds, pero ni el árbitro Michael Olivier ni el VAR contemplaron.
El triunfo pudo haber quedado para cualquiera de los dos bandos, sin embargo, la igualdad dejó al local en la cima de la tabla de posiciones (con 64 puntos, al igual que Arsenal, que tiene mejor diferencia de gol) y a los Ciudadanos un escalón por debajo. Fue tanta la tensión que reinó en el ambiante que se dio un inesperado cruce entre Pep Guardiola y uno de sus referentes, Kevin De Bruyne.
La polémica se instaló a los 68 minutos cuando el orientador, entrenador del último campeón inglés, decidió realizar un doble cambio: a la cancha Jeremy Doku y Mateo Kovacic, al banco Julián Álvarez y el citado De Bruyne. Allí, el belga, quien había sido clave en la apertura del marcador (ejecutó la pelota quieta en la que Stones aprovechó una cortina para inflar la red) se detuvo junto al ex Barcelona y, señalando el campo de juego, le reclamó la sustitución.
Fueron varios segundos de miradas fulminantes e intercambio de palabras, hasta que el mediocampista ofensivo se retiró a su ubicación.
Pep no quedó conforme con lo que captaron las cámaras. En consecuencia, instantes después, se instaló junto a De Bruyne en el banco de suplentes y le explicó el por qué de su determinación. En dicha escena también abundaron gestos. Luego, tras el pleito, se los vio fundidos en un abrazo, como exhibiendo que dejaron el entuerto atrás.
“Me puso feliz ver eso, me gusta si él está decepcionado por salir, es bueno. Él ya está bien ahora. Sé qué es lo que perdemos cuando no está, perdemos mantener el balón”, dijo el director técnico sobre el vodevil una vez finalizado el encuentro.
Vale recordar que De Bruyne es uno de los lugartenientes de la brillante etapa de Guardiola en el City. El volante, de 32 años, acumula 17 títulos con los Ciudadanos, incluyendo cinco Premier Leagues y una Champions, celebrada en la edición 2022/2023. Tal es la simbiosis entre ambos que al DT le costó reemplazarlo en el inicio de temporada, cuando fue baja por lesión (Julián Álvarez, con otras características, cumplió su función de a ratos).