El mundo del deporte se vio conmocionado por la noticia de la muerte de Benjamin Kiplagat, atleta olímpico ugandés que fue hallado sin vida en un auto en Kenia. Si bien las autoridades locales informaron que se abrió una investigación, sospechan que pudo haber sido un asesinato.
El deportista, que representaba a Uganda y participó de los Juegos Olímpicos de Londres y de Río de Janeiro, presentaba una herida cortante en su cuello. El cuerpo sin vida de Benjamin fue encontrado dentro del auto de su hermano en la madrugada del domingo en una carretera ubicada en los alrededores de la ciudad de Eldoret, en el valle del Rift, en el oeste de Kenia. Se trata de una zona donde frecuentemente los deportistas se dirigen a entrenar. Luego de que los vecinos del lugar informaran a la policía que un vehículo se había accidentado, los efectivos acudieron al lugar y se encontraron con la terrible escena.
“Aún estamos investigando el incidente para determinar qué ocurrió realmente, pero lo que podemos confirmar es que el hombre encontrado muerto es un atleta internacional llamado Benjamin Kiplagat. Se ha abierto una investigación y la policía busca pistas”, declaró Stephen Okal, comandante de Policía del subcondado de Moiben, en el condado de Uasin Gishu (oeste).
Sin embargo, medios locales ya hablan de que se trataría de un asesinato debido a las heridas que presentó el cuerpo de Kiplagat, que además de haber sido apuñalado en el pecho tenía un profundo corte en el cuello, precisó Okal. Por su parte, Barnabas Korir, funcionario de atletismo de Kenia, lamentó la muerte del atleta. “Instamos a la policía a acelerar las investigaciones y… encontrar a sus asesinos”, pidió Korir.
Por su parte, la World Athletics, el órgano que nuclea el atletismo a nivel mundial, se mostró “consternada y entristecida” por la muerte de Kiplagat y compartió el pésame a su familia, amigos y compañeros a través de la red social X (antes Twitter): “World Athletics está consternada y entristecida al enterarse del fallecimiento de Benjamin Kiplagat. Enviamos nuestro más sentido pésame a sus amigos, familiares, compañeros y compañeros deportistas. Nuestros pensamientos están con todos ellos en este momento difícil”.
Benjamin tenía 34 años. Nació en Kenia, pero representó a Uganda en la competición internacional en pruebas como los 3.000 metros con obstáculos. Además, integró su delegación en los Juegos Olímpicos y Mundiales de atletismo, entre otros eventos. Entre sus principales galardones posee la medalla de plata en 3.000 metros con obstáculos en el Mundial júnior de 2008 en Polonia y la presea de bronce en el Campeonato de África de 2012, en Benín.
Pese a su destacada carrera juvenil, Kiplagat sufrió algunos problemas de salud que complicaron su ascendente carrera en el atletismo. En 2009 enfermó de malaria y fiebre tifoidea que le impidió saltar a las pistas por una temporada. En 2010 volvió a sufrir malaria y un forúnculo en la pierna retrasó su aparición.
El debut olímpico de Kiplagat fue en Beijing 2008, donde terminó noveno en la carrera de obstáculos, su especialidad. En la misma prueba compitió en los Mundiales de Berlín 2009 (11°), Daegu 2011 (10°), Moscú 2013 (14°), Beijing 2015 (31°) y Doha 2019 (18°). Además, participó en los Juegos de Londres 2012, donde fue finalista y descalificado, aunque firmó su mejor actuación en un evento de ese nivel. En los Juegos Olímpicos Río de Janeiro 2016 terminó 19° y consiguió el bronce en los Campeonatos Africanos de 2012.
En octubre de 2012, en un centro de entrenamiento cercano a Eldoret, la atleta keniana Agnes Tirop de 25 años, plusmarquista mundial femenina de 10 kilómetros en ruta y especialista en los 5.000 metros, también murió tras ser apuñalada en su casa de Iten. De aquel hecho, el principal sospechoso fue su Ibrahim Rotich, quien tras ser acusado de homicidio se declaró inocente y fue puesto en libertad bajo fianza en noviembre pasado luego de años en prisión preventiva. Mientras tanto aguarda del inicio del juicio.