Mike Tyson, uno de los mejores boxeadores en la historia del deporte, reveló en una entrevista radial que toda su vida fumó marihuana y detalló cuál fue la pelea en la que entró drogado al ring. En aquella ocasión ganó por nocaut técnico.
En 2018 el ex púgil estadounidense abrió «Tyson Ranch», una plantación de cannabis de más de 80 mil metros cuadrados dedicado a la venta y estudio de la marihuana. «Voy a producir la mejor», aseguraba tras poner en marcha su negocio en California, ciudad en la que se legalizó el consumo.
«Fumé marihuana justo antes de entrar en el vestuario para pelear contra Andrew Golota… Y no me afectó. Le hizo más efecto a él», reconoció el neoyorquino en el programa «Dan Patric Show». Aquel combate del 20 de octubre del 2000 significó su vuelta al ring después de pasar quince meses alejado del cuadrilátero, suspendido por el mítico mordisco en la oreja a Evander Holyfield.
La pelea terminó por nocaut técnico de Tyson. El polaco Golota no pudo salir a disputar el tercer round y se retiró del recinto abucheado por los miles de fanáticos que habían acudido al Palace of Auburn Hills de Michigan.
«Toda mi vida fumé, básicamente», explicó, al mismo tiempo en el que afirmó que esa había sido la única vez en su carrera que había fumado antes de entrar al cuadrilátero.
Durante mucho tiempo Mike Tyson fue un fiel activista del uso del cannabis con fines médicos: «He estado peleando por más de 20 años y tengo muchos dolores y molestias (…) Si no tuviera cannabis, no se que pasaría», confesó el ex boxeador a CBC Los Ángeles.
«Voy a producir la mejor marihuana de la zona, por lo que no me preocupa la competencia», aseguró en septiembre. El estadounidense aprovechó que en noviembre de 2016 California despenalizó el consumo de marihuana para los mayores de 21 años.