Sabido es que los jugadores brasileños se apoyan hasta extremos insospechados, pero no por ello deja de sorprender que Marcelo haya menospreciado a Hazard, el fichaje estrella del Real Madrid, para alabar a su amigo Neymar.
En una entrevista al canal de Youtube De Sola, presentado por Alê Oliveira, el lateral respondió a las preguntas de los internautas y dejó algunas perlas, especialmente la referencia al nuevo galáctico de Florentino.
«Hazard es un ‘crackazo’, muy bueno, es mi compañero ahora en el Real Madrid. Y Neymar la gente sabe de sus cualidades, en el top 5 también. Conozco a Neymar desde su época en el Santos. El piensa una cosa en el campo y enseguida cambia y hace otra cosa, es increíble. Comparar es difícil de comparar, pero para mí Neymar es bravo, es mejor», señaló.
Sobre si querría que Neymar jugase en el Madrid, lo dejó bien claro. «Neymar es un crack y en el Madrid están los mejores jugadores del mundo. Sería un placer inmenso que jugara en el Madrid pero no soy quien decide».
Si eso pasara, no tendría ningún problema por su pasado barcelonista y recordó una anécdota al respecto.»Una vez estábamos en pretemporada y, como es amigo mío y de Casemiro, vino al vestuario del Real Madrid. Entró, saludó y conversé con él. Nada de fútbol. Cuando acaba el partido, se aparca la rivalidad».
También tuvo elogios para Zidane. «Él lo habla todo a la cara, si le gustan las cosas o si no le gustan es muy sincero con todos, y como jugó al fútbol y fue de los mejores, consigue meterse en la cabeza de los jugadores. Es mucho más sencillo así. Él vivió cosas que la mayoría de los jugadores del Madrid ahora están viviendo como ganar Champions y esas cosas. Pero si un entrenador no jugó al fútbol pero tiene cariño con los jugadores, sabe entender, es trabajador… No tiene mucho misterio. Si no jugó también puede ser entrenador, claro. Zidane impone respeto y Mourinho, que no jugó en Primera, también tenía el respeto».
En cuanto a Solari, reconoció que pudo tener problemas con él. «Podía haber tenido un roce, sí. Podía haber montado un barullo, pero yo no soy así. Yo prefiero trabajar y esperar mi oportunidad. Me quedé en el banquillo un mes, dos meses… Pero siempre soy el mismo, no cambio. Seguí trabajando, sabía que mi oportunidad llegaría y llegó después. Lo utilizo como aprendizaje, se valoran más las cosas. Sabes que vas a jugar, sabes que vas a ser un pilar… Lo valoré esta temporada, en esos dos meses que me quedé fuera. Cada entrenamiento lo valoré, varios momentos con los compañeros dándoles fuerza…Mis compañeros me miraban cuando no jugaba y me miraban diferente, porque pensaban por qué no estaba enfadado, por qué no estaba discutiendo con el entrenador…Yo quería recibir alguna explicación, no tuve ninguna. Pero no fue un problema. Lo utilizo como aprendizaje, entrené más, me cuidé más, apoyé a mis compañeros más… Para mí fue muy importante. Y ahora tengo que luchar de nuevo».