A la vez que Amazon produce la serie Sueño bendito, que aún sin fecha de estreno precisa ya cosechó una gran repercusión, el otro gigante del streaming se embarcó en un proceso similar: Netflix también llevará a la pantalla la vida de Diego Maradona pero con un filme, E stata la mano de Dios, es decir, Ha sido la mano de Dios.
En clara referencia al primer gol que El 10 anotó contra Inglaterra en el Mundial de México 86 -minutos después llegaría su gran obra maestra-, el largometraje estará a cargo de Paolo Sorrentino, un director italiano que también conoce la gloria en lo suyo: en 2013 se alzó con el Oscar a mejor película extranjera por La grande bellezza.
Creador de las series The Young Pope (2016) y The New Pope (2020), Sorrentino nació en Nápoles, la ciudad que cobijó a Maradona como ninguna otra. Y que todavía hoy, a casi tres décadas de que el ídolo partiera, todavía lo adora. El director, como sus conciudadanos, no puede escapar de esas emociones: en una entrevista al diario Il Corriere della Sera llegó a confesar que le “debe la vida” a Diego. En su caso, la referencia es literal.
El cineasta tenía 16 años cuando sus padres murieron en un accidente doméstico: inhalaron monóxido de carbono que desprendió una calefacción, en su casa de fin de semana ubicada en las montañas. Ese día el joven Paolo no estaba con ellos: luego de años de insistencia había conseguido que su papá le permitiera ir ver jugar al Napoli de Maradona en condición de visitante. Si bien tuvo que enfrentar la tragedia familiar, ese hecho fortuito lo mantuvo a salvo.
“Estoy feliz de compartir esta aventura con Netflix y con el productor Lorenzo Mieli”, aseguró Sorrentino en un comunicado que difundió en estas horas, sin acercar mayores detalles sobre qué aspecto de la vida del astro abordará en su filme. Semanas atrás la pandemia lo obligó a suspender el rodaje de otro filme suyo en los Estados Unidos, por lo cual este nuevo proyecto -que también lo cuenta como guionista- lo llena de entusiasmo.
No obstante, Ha sido la mano de Dios ya se topó con una polémica que podría jaquear su realización. “Diego Maradona no autorizó el uso de su imagen para esta película”, advirtió su abogado, Matías Morla, desde su cuenta de Twitter. Y se explayó: “Con nuestros colegas italianos ya estamos diagramando la estrategia legal para hacer una presentación formal ante la Justicia por el uso indebido de una marca registrada”.
Es posible encontrar un antecedente en 2017, cuando el actual director técnico de Gimnasia y Esgrima de La Plata entabló una demanda contra la empresa de videojuegos Konami por un motivo similar: lo habían incluido sin su permiso en el juego PES 2017. En mayo de ese año Maradona y la empresa llegaron a un acuerdo por una suma millonaria que no trascendió (se anunció que una parte sería utilizada para la construcción de canchas de fútbol para niños de Argentina), y el juicio fue cancelado.
Este conflicto con Netflix, en cambio, recién transita sus instancias iniciales.
El miércoles trascendió el acuerdo que Diego rubricó con Amazon para su biopic. “Autorizo a que se traten los siguientes temas que trágicamente me ha tocado vivir”, se lee en el contrato respecto a los 14 hechos que involucran directamente a su ex esposa, Claudia Villafañe (la acusa de estafas millonarias e infelidades), pero también a sus dos hijas mayores, Dalma y Gianinna (asegura que lo obligaron a firmar un testamento en su favor cuando “estaba en grave estado, a punto de perder la vida”)