Manifestantes franceses contra la reforma de las pensiones irrumpieron el martes en la sede de los Juegos Olímpicos de París 2024 cuando los sindicatos hicieron un último intento de presionar a los legisladores para que reviertan el aumento de la edad de jubilación del presidente Emmanuel Macron.
La televisión BFM transmitió imágenes de varias docenas de militantes sindicales de la CGT de extrema izquierda que ocuparon brevemente el edificio en Aubervilliers, al norte de la capital, mientras marchaban en pueblos y ciudades de Francia.
“No hubo violencia ni daños”, informó a la agencia Reuters un portavoz de los Juegos. Los sindicatos han luchado contra la medida de Macron para hacer que los franceses trabajen más tiempo desde mediados de enero, con huelgas y protestas continuas que en ocasiones se han convertido en violencia en los márgenes.
El mandatario asegura que fue necesario elevar la edad legal de jubilación en dos años a 64 para tapar un déficit de pensiones cada vez mayor. Sin embargo, los sindicatos dicen que el dinero se puede encontrar en otros lugares, como gravar más a los ricos.
“Esta será la última protesta de este tipo sobre el tema de las pensiones”, dijo Lauren Berger, directora del sindicato reformista CFDT, antes de la protesta en París. Sophie Binet, líder de la CGT, dijo que su sindicato seguirá luchando. Aun así, reconoció que la participación caería en las rondas anteriores. “Hay mucha ira, pero también cansancio”, sostuvo Binet, y agregó que los huelguistas habían sentido el pellizco en sus billeteras.
Por su parte, la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, aseguró este martes: “Estamos listos para acoger los Juegos Olímpicos”, pese a las dudas planteadas el lunes por un responsable del Comité Olímpico Internacional (COI). ”Sí, estamos listos”, sostuvo en la radio France Inter.
El presidente de la comisión de coordinación de los Juegos de París, Pierre-Olivier Beckers, estimó durante una reciente visita que habría que seguir “optimizando” para “mantener el presupuesto”. A 417 días del inicio del megaevento deportivo “todavía queda mucho trabajo por hacer”, abundó este responsable del COI, para quien el Comité de Organización de los Juegos (COJO) tendrá un duro trabajo “hasta el final” en materia presupuestaria.
El presupuesto del comité de organización aumentó en diciembre hasta los 4.400 millones de euros (4.700 millones de dólares), sobre todo a causa de la inflación.
