La depuración de plantel que llevará adelante el Real Madrid en el venidero mercado de pases le abre la puerta a muchos clubes a poder contratar aquellos futbolistas que juegan en el cuadro español y que hasta hace un par de meses parecían inalcanzables.
En este puñado de equipos aparece el París Saint-Germain (PSG) que esta campaña volvió a decepcionar a sus fans a perder en octavos de final de la Champions League, en esta ocasión ante el Manchester United. Esta nueva eliminación precoz planteó en el ceno de la dirigencia la idea de volver a contratar estrellas para buscar conquistar Europa el próximo año.
Entre los jugadores apuntados por el diario Le Parisien aparecen tres que visten la camiseta del Real Madrid, que a su vez ocupan un lugar en la «Lista negra» de Zinedine Zidane, entrenador del cuadro blanco.
El primero es Gareth Bale. El galés tuvo un bajo rendimiento durante toda a temporada y había perdido la titularidad durante el tiempo en el que Santiago Solari ocupó el cargo de técnico. Con la llegada de Zidane sumó más minutos, pero sólo sirvieron para demostrar por qué el argentino no lo tenía en cuenta, por lo que su salida dependerá de las ofertas que lleguen.
Otro de los pretendidos por el PSG es Isco. Las grandes actuaciones del español quedaron en el pasado y nunca pudo asentarse en el 11 titular, por lo que su salida es casi un hecho.
El otro futbolista que quiere adquirir el cuadro parisino es Toni Kroos. Zidane le devolvió la titular en las últimas cuatro jornadas, pero las actuaciones del alemán están lejos de asemejarse a la de años atrás, cuando era la pieza clave del equipo.
El PSG está dispuesto a desembolsar cerca de $235 millones por estos tres futbolistas, aunque la dirigencia del Real Madrid sabe que el club tiene algo más preciado que el dinero. Una de las prioridades que tiene Zidane para mejorar su ataque es el arribo de Kylian Mbappé, la joven estrella francesa, por lo que no es descabellado que la dirigencia española proponga un trueque en la negociación.