El Phoenix Suns Arena albergó este jueves el segundo partido de las finales de la NBA. En él, los locales Phoenix Suns y los Milwaukee Bucks se enfrentaron, buscando los primeros una mayor ventaja y deseando los segundos conseguir el empate. A pesar de que el griego Giannis Antetokounmpo realizó un partido para enmarcar, los Bucks no fueron capaces de encontrar el primer empate en la serie y los Suns se hicieron con el 2-0 gracias a un resultado de 118-108.
El duelo arrancó con unos Suns incisivos en el juego exterior y unos Bucks que hicieron de la pintura su hábitat. En el primer cuarto, los de Milwaukee hicieron veinte puntos en la zona, mientras que los de Phoenix no consiguieron anotar por dentro.
Tras un primer cuarto apretado pero victorioso para los Bucks (26-29), Chris Paul tomó el mando y los Suns le dieron la vuelta al marcador de cara al final del segundo cuarto gracias a la efectividad en la media distancia (56-45).
En el tercer cuarto el griego Antetokounmpo pasó por encima de DeAndre Ayton y anotó, en cinco minutos, trece puntos que llegaron a ser veinte antes de iniciar el último tiempo. Pero Devin Booker y Chris Paul supieron mantener la distancia para dejar el electrónico en 88-74 antes del último tiempo.
Los triples de Booker y la eficacia de los Suns recogiendo rebotes ofensivos no permitieron que la furia de Antetokounmpo alcanzase a la franquicia local. El griego acabó el partido con un 15 de 22 en tiros de campo que se tradujo en 42 puntos, y 12 rebotes.
El remate 118-108 otorga un 2-0 en la serie para los de Phoenix, que viajarán ahora a Milwaukee para disputar el tercer choque de as finales.