Liverpool y Manchester United coprotagonizaron este domingo un Clásico inglés que se jugó de tú a tú de principio a fin, como si no fueran 23 los puntos que separan a unos de los otros en la clasificación, y que finalizó con 2-2 en el luminoso de Anfield al marcar Amad Diallo el gol del empate visitante cuando los locales ya se las prometían muy felices y se veían ampliando su ventaja en el liderato hasta los 8 puntos (y con un partido jugado menos) respecto al Arsenal, que es su más inmediato perseguidor.
Llegó el Manchester United a este encuentro en horas bajas, habiendo sumado Rúben Amorim 7 puntos de 24 posibles desde que accedió al cargo en sustitución de Erik ten Hag, pero los ‘red devils’ dieron mucha más guerra de lo que presagiaban unas predicciones que aventuraban la goleada local como resultado más que factible.
Durante el primer acto, la contiendo vino a ser un combate nulo aunque disputado en todo momento con revoluciones altas y como si la vida le fuese a unos y otros en cada balón dividido. De hecho, se llegó al descanso con 0-0 y a la postre fueron los visitantes los primeros que consiguieron alterar ese tanteo. Fue en el 52’, cuando ‘Licha’ Martínez, con un potente zurdazo tras internarse en el área habilitado por Bruno Fernandes, hizo enloquecer a la grada visitante.
No obstante, ese gol no hizo más que activar al Liverpool. Verse por debajo en el marcador hizo que metiesen una marcha extra, y en apenas 10 minutos remontaron. En el 59’ empató Gakpo, en una acción muy similar a la de ‘Licha’ Martínez en el 0-1 y sentando a De Ligt en el suelo. Y en el 70’, tras una mano del propio defensa neerlandés, fue Salah el que marcó para poner a los suyos por delante en el marcador.
Pareció entonces que el camino hacia el triunfo se allanaba para el Liverpool, pero el Manchester United sacó fuerzas de flaqueza y en el 80’ Amad Diallo empató mediante un penalti en movimiento tras recibir un centro de Garnacho desde la banda izquierda.
De ahí hasta el final, todavía hubo alternativas para ambos, con los jugadores de ambos equipos desafiando a las leyes del esfuerzo físico y el agotamiento, pero el marcador ya no volvió a moverse. Especialmente cerca estuvo de hacerlo Maguire en la última jugada del partido, pero mandó el balón a las nubes desde al rematar a la altura del punto de penalti un pase de Zirkzee.
Con un partido pendiente, el Liverpool es líder con 6 puntos de renta sobre el Arsenal. El United, por ahora, lejísimos de la zona alta, pero salió vivo de Anfield.
