Yaroslava Mahuchikh (Dnipró, 2001) voló más alto que nunca en la Diamond League de París para batir uno de los récords del mundo más longevos de la historia. La ucraniana franqueó el listón en 2,10 metros para superar la histórica plusmarca de Stefka Kostadinova (2,09m), vigente desde el Mundial de Roma 1987. “Me siento pletórica porque pude completar un salto increíble y lo hice en la primera tentativa. Realmente fue increíble porque el salto anterior en 2,07m lo salté al segundo intento y era ya mi marca personal”, aseguró muy emocionada la nueva plusmarquista.
“Cuando logré la marca personal, mi entrenadora me dijo que era mejor parar y reservarse para los Juegos Olímpicos al ser un objetivo más importante. Pero sentí dentro de mí que podía hacerlo y, siendo sincera, quería intentar ese récord del mundo”, confesó la ucraniana.
Mahuchikh, completó un concurso irregular, con una primera nula sobre 1,95 que logró solventar en el siguiente intento. Su principal rival en el estadio de Charlety fue la australiana Nicola Olyslagers, que con su talento fue obligando a la ucraniana a superarse en cada salto. La oceánica superó el 2,01m y chocó tres veces en el 2,03m para dejar a Mahuchikh en solitario. La ucraniana se probó primero con el 2,07 y lo pasó de forma limpia en la segunda tentativa y con muy buenas sensaciones. En ese momento, vio claro que podía atacar la histórica plusmarca de Kostadinova fijada en 2,09m desde 1987 y pidió el listón sobre 2,10m. Visualizó el salto, armó las piernas y tiró de toda la fuerza que tenía para impulsarse más que nunca y elevarse donde ninguna mujer lo había hecho antes. Un récord histórico que llega a poco menos de un mes de afrontar los Juegos de París, que se disputarán en otra sede, en el Stade de France de Saint-Denis.
Una atleta con un físico imponente, una espalda poderosa y unas largas piernas fibrosas que la catapultan con precisión quirúrgica sobre el listón. Su fuerza mental le permite sobreponerse a cualquier circunstancia, como la guerra que está viviendo su país y que le obligó a refugiarse en Alemania con el apoyo de sus patrocinadores.
El segundo récord de la jornada lo firmó Faith Kipyegon en 1.500m con 3’49·04, gracias al buen trabajo de la mallorquina Daniela García, que marcó el ritmo como liebre hasta el 800m. “Estoy más convencida que nunca de buscar el doblete 1.500m – 5.000m en París 2024”, dijo la keniana. Por su parte, Esther Guerrero también aprovechó la rapidísima prueba para romper la barrera de los cuatro minutos y dejar su tope personal en 3’59”74 para ser la 12º clasificada. De esta forma, la de Banyoles se convierte en la segunda española capaz de romper esta icónica barrera, por detrás de la tarraconense Natalia Rodríguez con 3’59”51 (récord nacional). En el 110 vallas, la final contó con dos españoles. Quique Llopis confirmó su excelente estado de forma con una cuarta plaza con 13”21 y Asier Martínez fue séptimo con 13”35 y todavía con detalles por pulir.