Diego Costa padece un fuerte esguince tras sufrir una escalofriante entrada. Tras hacerle pruebas se descarta una afectación ósea.
Diego Costa sufre un esguince de alto grado en el tobillo izquierdo que se produjo en el partido amistoso ante el Beitar de Jerusalén, un encuentro que además suponía su reaparición con el equipo rojiblanco.
El hispano-brasileñosufrió una dura entrada de un jugador local en el minuto 23, en la que se pudo ver cómo su tobillo se doblaba, y tuvo que abandonar el terreno de juego en camilla en el minuto 28.
Poco después, el Atlético de Madrid informaba de que el de Lagarto sufría «un esguince de alto grado en el tobillo izquierdo», aunque las pruebas radiológicas que se le realizaron después en un hospital de Jerusalén «han descartado una afectación ósea». «Tras regresar a Madrid se realizarán más pruebas para valorar el grado de afectación ligamentosa», añade la entidad colchonera.
Costa volvía a jugar este martes con el conjunto rojiblanco, algo que no ocurría desde el pasado 6 de abril, cuando fue expulsado ante el Barcelona y recibió ocho partidos de sanción por menosprecio al colegiado Jesús Gil Manzano.
Anteriormente, el delantero se había perdido más de dos meses de competición después de someterse a una operación del quinto metatarsiano del pie izquierdo el 5 de diciembre.