El partido prometía y no defraudó en absoluto. Barça y PSG empezaron con ganas y un penalti sobre De Jong lo transformó Messi, pero Mbappé tenía otros planes. Empató el francés y todo se definía en la segunda parte.
Ahí se doctoró un Kylian Mbappé que marcó dos más, el segundo y el cuarto. Una sensación de superioridad en todo, una falta de concentración en el gol de Kean y la sensación en el Barça de que esto es lo que hay.
El francés que por primera vez jugaba en el Camp Nou, sin Neymar ni Di María y se ha marcado un partido antológico con un hat trick y siendo un peligro constante. Mbappé hay que recordar tiene sólo 22 años, como dato.
4-1 terminó la ida de octavos entre Barça y PSG con la sensación de que la eliminatoria está absolutamente cerrada para los franceses. El próximo 10 de marzo, la vuelta, pero esto pinta a parisino en la noche mágica de Mbappé.