Un escándalo sacude por estas horas al fútbol de los Estados Unidos. El futbolista Collin Martin, jugador abiertamente gay de San Diego Loyal, fue víctima de la homofobia en el partido ante Phoenix Rising correspondiente la cuarta jornada de la United Soccer League (USL), el campeonato de segunda división. Esto implicó que su entrenador, el legendario Landon Donovan, decidiera abandonar el partido en forma de protesta.
Ocurrió durante el tiempo agregado del primer tiempo de este encuentro disputado en el Torero Stadium de San Diego. El cuadro local se imponía por 3-1 cuando Collin Martin recibió insultos homofóbicos por parte de Junior Flemmings, lo que desató una discusión entre ambos equipos e incluso la expulsión del jugador víctima.
Al ver que su colega Rick Schantz no entraba en razón mientras discutían con los árbitros, Landon Donovan –quien jugó tres Mundiales con la selección estadounidense y militó en grandes clubes de Europa (Bayer Leverkusen, Bayern Múnich y Everton) en su etapa de jugador– decidió abandonar el campo de juego en señal de protesta. El técnico de Phoenix Rising argumentaba que “eran cosas del fútbol” y el ahora DT de San Diego Loyal trataba de hacerle entender que no debían permitir acciones como estas dentro del deporte.
El 3-1 finalmente no fue reconocido en los resultados de la liga y fue declarado perdido. La USL Championship emitió un comunicado en el que explica que está investigando el incidente.
“Somos conscientes del supuesto uso de un insulto homofóbico en el partido de esta noche entre San Diego Loyal SC y Phoenix Rising FC. El lenguaje soez y abusivo de cualquier tipo no tiene cabida en nuestra sociedad y no será tolerado en los partidos de la USL. Actualmente se está llevando a cabo una investigación para determinar los hechos que rodearon el incidente y se proporcionará más información tan pronto como esté disponible”, escribieron.
Al término del encuentro, Landon Donovan explicó en una entrevista para su club por qué decidió dejar el campo: “Nuestros muchachos simplemente dijeron: ‘No vamos a tolerar esto’. Tuvieron muy claro en ese momento que estaban renunciando a todas las esperanzas de llegar a los playoffs, a pesar de que estaban derrotando a uno de los mejores equipos de la liga. Pero dijeron que eso no importa, hay cosas más importantes en la vida y tenemos que defender lo que creemos. Y ellos tomaron la decisión de marcharse.”
También habló al respecto Collin Martin, el futbolista insultado, quien emitió un comunicado a través de las redes sociales donde comienza revelando que Flemmings le dijo “Bati Boy”, lo que él interpreta que puede traducirse como “maricón”.
Por su parte, el Rising también emitió un comunicado y dijo que está “investigando el reclamo de un insulto homofóbico” utilizado por uno de sus jugadores, agregando que el futbolista señalado “niega con vehemencia estas acusaciones”.
El propio Junior Flemmings luego se identificó como el acusado de usar el insulto anti-gay y calificó la acusación como falsa, diciendo que sus compañeros de equipo apoyarían su dicho: “En ningún momento dije un insulto homofóbico hacia Collin Martin. No conozco a Collin personalmente, pero respeto a todos mis oponentes por igual, incluido Collin. Me solidarizo con el movimiento LGBTQ +”.
No es el primer incidente de este estilo de esta temporada en la United Soccer League (USL), ya que el jugador Omar Ontiveros, de Los Angeles Galaxy II, fue suspendido por la liga y finalmente echado por su equipo tras discriminar a Elijah Martin, un futbolista afroamericano compañero de Collin Martin en San Diego Loyal.
Con información de Infobae
Bola de maricones y llorones las locas