Joao Félix se ha convertido en la mayor sensación del fútbol portugués desde Cristiano Ronaldo. El pasado 11 de noviembre cumplió 19 años y su irrupción en la élite ha sido brutal. Esta temporada ya ha marcado siete goles en poco más de 1,000 minutos de juego y todos los grandes de Europa le siguen de cerca.
El último en unirse al interés por el «huracán Félix», como le ha bautizado la prensa portuguesa, es el Madrid. En el club blanco le conocen desde hace años, puesto que el delantero benfiquista destrozó al Juvenil de Guti en la semifinal de la Youth League 2016-17, marcando dos goles. Desde entonces no le han quitado el ojo de encima, pero el gran rendimiento que está teniendo en su primera campaña en la élite ha hecho que ese interés se haya intensificado.
El pasado 29 de enero, el Benfica recibió al Boavista en la jornada 19 de la liga portuguesa. En las gradas del Estadio Da Luz se encontraban ojeadores del Barcelona, Atlético, Manchester United y Borussia Dortmund para ver de cerca a Joao Félix. El delantero les impresionó con una exhibición: abrió el marcador, dio la asistencia del tercer gol de su equipo e hizo la jugada del cuarto.
Todavía más reciente es el recital que ofreció este domingo en el derbi contra el Sporting de Portugal: marcó un gol, provocó un penalti y el VAR le anuló un posible doblete. Además del interés público de esos cuatro clubes y del que el medio As desvela del Madrid, Juve, PSG, Monaco, Bayern, Milan y West Ham han ido un paso más allá preguntando al Benfica por su precio.
Una cláusula de 120 millones
En este mercado de invierno, el Benfica ya recibió una oferta en firme de 60 millones de un club de la Premier League. Sin embargo, el club lisboeta logró retenerle con una subida de sueldo y un aumento de su cláusula de rescisión hasta los 120 millones. Tiene contrato hasta 2023, pero los dirigentes benfiquistas se han puesto manos a la obra para subir su blindaje hasta los 200 millones.
Algunos ojeadores aseguran que su potencial es similar o mayor que el de Mbappé, pero que en todo caso ambos están llamados a ser los grandes dominadores del fútbol tras Messi y Cristiano. Precisamente, el genio de Viseu sueña con seguir los pasos del crack portugués y poder triunfar un día en el Madrid.
