El estadounidense Rai Benjamin se proclamó campeón olímpico en una de las finales estelares del atletismo de estos Juegos de París, los 400 metros vallas, en la que el brasileño Alison Dos Santos fue bronce este viernes.
Benjamin se impuso con un tiempo de 46 segundos y 46 centésimas, intercambiando puestos en el podio con el campeón olímpico de hace tres años, el noruego Karsten Warholm, plata con 47.06, mientras que Dos Santos repitió tercer puesto olímpico, esta vez al acabar en 47.26.
Los tres hombres que protagonizaron una carrera para la historia hace tres años volvieron a estar en el podio, pero esta vez sus tiempos fueron más estándar que en la capital japonesa.
En Tokio, Warholm había incluso batido el récord del mundo con un crono de 45.94. Esta vez corrió en un segundo y doce centésimas más.
Benjamin firmó en la anterior final olímpica la segunda mejor marca de la historia (46.17). Esta vez se quedó a 39 centésimas, pero lo que entonces le valió una plata olímpica le ha servido ahora para colgarse el oro.
El vallista neoyorquino suma su tercera medalla olímpica y la segunda de oro, ya que en Tokio se había coronado con el relevo 4×400 metros de su país.
Rompe sobre todo la hegemonía total en la prueba del plusmarquista Warholm, campeón mundial y europeo. El noruego pierde ahora su condición de rey olímpico.
El bronce de Alison Dos Santos es la primera medalla para el atletismo brasileño y sudamericano en las pruebas en pista de estos Juegos Olímpicos.
Brasil había logrado otra medalla en el atletismo de París-2024 pero fue fuera del estadio, en la marcha y a los pies de la Torre Eiffel, donde Caio Bonfim fue plata el jueves de la pasada semana en los 20 kilómetros.
La medalla de Alison Dos Santos era la gran esperanza del gigante sudamericano para no irse de vacío de las carreras en el estadio y la estrella paulista de 24 años pudo acelerar en la recta final para hacerse con el tercer puesto pese a la presión del francés Clement Ducos (47.76), empujado por un público local entusiasmado pero que se quedó con la miel en los labios, con el cuarto lugar.