El ex futbolista del Celta y actual jugador del Inter Porto Alegre de Brasil, Hugo Mallo, se enfrenta a un posible juicio por un incidente que ocurrió el 24 de abril del 2019. Según informó el periódico español As, el defensor fue acusado de abusar sexualmente de una mujer que se desempeñaba como mascota del Espanyol.
El hecho se habría producido en un evento previo al inicio del encuentro entre el Celta de Vigo y los periquitos, quienes jugaron de local en el Cornellà-El Prat. Al día siguiente del incidente, se presentó una denuncia formal ante los Mossos d’Esquadra (Policía de Catalunya).
De acuerdo con la acusación, el hecho tuvo lugar cuando Mallo interactuaba con las mascotas del equipo. Los representantes legales de la denunciante, que en ese momento estaba con el disfraz de la periquita, declararon: “Cuando Hugo Mallo llegó a la altura de las mascotas, al periquito le dio mano, pero cuando llegó a ella, que en ese momento estaba haciendo el papel de la periquita, éste introdujo las manos bajo el disfraz y le hizo tocamientos en los pechos”. Además, se añadió que Mallo “agarró los pechos y empezó a hacer movimientos”.
La denuncia fue admitida a trámite y la presunta víctima ofreció su declaración por primera vez el 27 de junio de 2019. Posteriormente, Mallo tuvo la oportunidad de declarar el 10 de julio de 2019, donde negó cualquier comportamiento delictivo. A pesar de la solicitud de la defensa para desestimar el caso, la Audiencia Provincial de Barcelona, en mayo de 2021, determinó que, dadas las circunstancias y la “posición” del jugador en el momento del suceso, los alegatos de tocamientos podrían ser ciertos.
En cuanto a las repercusiones legales, el futbolista se enfrenta a un juicio el próximo 11 de julio de 2024, casi cinco años después del incidente. El periódico deportivo As informó que Mallo podría recibir “una pena de 24 meses de multa, a una cantidad diaria acorde al patrimonio del acusado, cuyo pago tendría como destinatario el Estado”, sentencia en la que coinciden tanto la Fiscalía como los abogados defensores.
Cabe mencionar que, según el Código Penal vigente en el momento de los hechos, la acción de Mallo está siendo juzgada como abuso y no como agresión sexual, en base a la legislación aplicable en ese momento. El periodista Iván Molero afirma que “tras meses de un una minuciosa investigación y después asimismo de contactar con ambas partes” el proceso judicial se realizará en el Juzgado de lo Penal número 19 de Barcelona.
El tema ya abrió el debate en redes sociales luego de mirar las escenas de lo sucedido dentro del campo de juego aquel día, aunque estas imágenes fueron analizadas por la jueza de la Audiencia Provincial, quien aclaró que “aunque parece que se produce de forma rápida, dura más que el resto de los saludos efectuados con anterioridad a la mascota, por lo que sí apreciamos que algo ocurre con la mascota y el jugador, ya que la mascota se mueve, le quita la mano al jugador y se coloca tras la mascota masculina; y podemos apreciar por la posición del jugador que ha podido incurrir en dichos tocamientos”.
El caso ha generado un notable interés público, especialmente debido al perfil del acusado y las circunstancias particulares del incidente. Además, el Espanyol ha expresado su completo apoyo a la presunta víctima, comprometiéndose a cubrir todos los gastos legales relacionados con el proceso judicial. Con este gesto, el club demostró una voluntad de respaldar a aquellos que se hayan visto perjudicados en situaciones de esta índole, dentro del marco deportivo y social.
Hay que tener en cuenta que Mallo, de 32 años, es un verdadero símbolo del Celta. Más allá de un breve paso en su carrera por la selección española para jugar el Mundial Sub 20 del 2011, el defensor fue un apellido de referencia para el equipo de Vigo que lo tuvo en su plantel de manera continuada desde mediados del 2009, con el equipo todavía en segunda, hasta que a mitad del 2023 decidió hacer una excursión por el fútbol brasileño con la indumentaria del Inter de Porto Alegre.