Bayern Múnich goleó 3-0 a Lazio en el encuentro de vuelta de los octavos de final de la Champions League gracias a los goles de Harry Kane -2- y Thomas Müller para dar vuelta la serie ante el conjunto italiano, que en la ida había derrotado a los alemanes por 1-0. Los dirigidos por Thomas Tuchel aguardan rival en cuartos.
Los locales, que por estar habituados a los éxitos tienen parámetros de exigencia muy altos, venían sumidos en una de las situaciones más difíciles que han atravesado en los últimos años con la eliminación en la Copa de Alemania y con la Bundesliga prácticamente perdida (tras 11 títulos en serie), se repusieron ante su público, que colmó el Allianz Arena y avanzaron de ronda en el certamen internacional.
Tras un asedio inicial y falto de eficacia, Kane rompió la igualdad en el minuto 39 de la primera etapa. El veterano Müller marcó el segundo justo antes del descanso (45+2) y el capitán de la selección inglesa completó su doblete en el 66 para liquidar una serie que había comenzado con el pie izquierdo en Roma.
A pesar de estar contra las cuerdas por malos resultados, el gigante bávaro sacó fuerzas para aferrarse a la ilusión en la Champions. En 40 participaciones solo cayó seis veces antes de los cuartos, ganándola en seis ocasiones. Y una vez más está en el ‘Top-8′ europeo. Nadie querrá ahora cruzarse con una bestia herida.
El plan del Bayern era marcar un gol cuanto antes para saciar el nerviosismo reinante, pero a su abrumadora puesta en escena le faltó eficacia. En 25 minutos sumaba diez tiros, con Jamal Musiala disparando con potencia pero demasiado centrado (14) y Kane revolviéndose en la frontal antes de rozar uno de los palos (17). El capitán de Inglaterra, aterrizado este año en Baviera para abrir por fin su vitrina de títulos tras una vida en el Tottenham, parecía apostar sobre seguro, pero los fracasos nacionales le empujan al todo o nada en la Champions. Con el triunfo de este martes queda a cinco partidos de levantarla.