El tenista número uno del mundo, el serbio Novak Djokovic, sigue siendo protagonista de varias polémicas. Ahora, tras ser deportado de Australia por no cumplir con los requisitos de vacunación del país oceánico, fue fotografiado en el avión que lo llevaba de regreso a Serbia con la mascarilla colgando de una oreja mientras leía un libro.
La imagen no tardó en hacerse viral y numerosos usuarios denunciaron la irresponsabilidad de su actitud, dado el peligro que representa para el resto de los pasajeros.
«Pensábamos que el problema era sanitario (antivacunas), cuando en realidad es de respeto por los demás», escribió un usuario.
La popularidad de Djokovic se ha visto muy afectada por su actitud frente al coronavirus y por su decisión de no vacunarse, que lo han convertido en un símbolo de los antivacunas y negacionistas frente al covid-19.
Djokovic abandonó Australia el pasado domingo, luego de que el Tribunal Federal del país emitiera su dictamen final, que volvió a cancelar el visado del deportista. Actualmente se encuentra en la capital de Serbia, Belgrado, donde fue recibido por una multitud de seguidores.