LaLiga quedó abierta este fin de semana después de la derrota sorpresiva del Atlético de Madrid ante el Leganés por la mínima, un resultado que pone el liderato en bandeja de plata para el Real Madrid, el equipo que tiene su partido pendiente de esta misma jornada 20 con el cual podrían ascender hasta lo más alto de la clasificación del fútbol español.
Un remate de Matija Nastasic en el minuto 49 después de un tiro de esquina le dio la esperanza al Leganés de conseguir la victoria en el Estadio Municipal Butarque; un panorama que se hizo realidad luego de un penal fallado de Antoine Griezmann en los minutos finales del encuentro.
Como es una constante, los Colchoneros dejaron las riendas del partido a sus rivales. La decisión les costaría caro porque en el momento en el que se quisieron enchufar, los visitantes no pudieron alcanzar el desempeño y ritmo futbolístico del Leganés.
A los locales les bastó un centro peligroso y un remate de Matija Nastasic en el minuto 49 para conseguir uno de los batacazos de la temporada. Por más que el técnico argentino, Diego Pablo ‘Cholo’ Simeone decidió cambiar de estrategia y mandar a todas sus tropas al ataque, el gol del serbio los jhabía dejado desahuciados.
Una mano en el área llevó al VAR a salir a escena y el vídeo de asistencia arbitral ocasionó que el central reculera en su decisión sobre el terreno de juego para otorgar un penal. Antoine Griezmann tomó el balón y cuando el delantero quiso asegurar la anotación por el sector izquierdo del arquero, su remate salió desviado: la pena máxima había sido fallada.
El resultado le permite soñar al Real Madrid, pues con un triunfo se ponen por encima de los Colchoneros debido a que entre ambos apenas hay una diferencia de un punto a favor del cuadro rojiblanco. El Leganés queda en la posición 15, lejos de una temporada histórica, pero al menos con suficiente colchón para no preocuparse por el descenso.