El fin de semana, 18 personas resultaron heridas luego de que un elefante pateara y golpeara con sus trompas, en un desfile religioso de Sri Lanka.
Durante la procesión anual de un templo budista de Kotte, capital de Sri Lanka, un elefante se salió de control, provocando que numerosas personas corrieran para ponerse a salvo.
La estampida alteró al paquidermo que desfilaba metros adelante y lo hizo correr alterado. A su huida del lugar, pasó por encima de varias personas y con su trompa empujó a otras más.
El hombre que lo montaba, se salvó resbalándose por un costado mientras otra persona intentaba detenerlo.
Los heridos fueron cargados por otros asistentes hasta un lugar seguro, del cual fueron trasladados a un hospital. De los 18, entre los cuales había niños y mujeres, 16 fueron dados de alta.
Quienes permanecen en el hospital presentan daño abdominal y una lesión en el oído.
