Este 12 de noviembre se cumplieron 50 años de un insólito evento que dio lugar a unos de los videos más virales de la historia: la explosión de una ballena varada de una playa de EE.UU. con media tonelada de dinamita.
El 9 de noviembre de 1970, un enorme cachalote de ocho toneladas y 13 metros de largo fue encontrado muerto en una playa de Florence, Oregón. Tras un debate sobre qué hacer con los restos del mamífero —unos proponían dejar que se descompusiera, otros intentar desmenuzarlo y algunos incluso enterrarlo— las autoridades tomaron una decisión inaudita: hacerlo explotar con dinamita y esperar que las gaviotas se comieran las sobras.
Esto sí, Paul Thornton, ingeniero de carreteras a cargo del operativo, admitía que «no estaba seguro de cuánta dinamita necesitaría» para destruir a la ballena.
Finalmente, decidió emplear media tonelada, y enterró 24 cajas de dinamita al lado de la ballena antes de hacerla estallar. Sin embargo, las cosas no salieron según el plan.
La explosión fue de película, eso sí, hasta el punto de que varios trozos (algunos, bastante grandes) de la criatura marina en descomposición llovieron del cielo, haciendo correr a los espectadores despavoridos en medio de gritos e incluso aplastando un automóvil.
El reportero de la cadena local KATU Paul Linnman y el camarógrafo Doug Brazil habían sido enviados para cubrir la explosión, en lo que se convertiría en un video viral décadas después. Las imágenes ganaron fama nacional en la década de los 90 y recibieron una atención renovada en la era de YouTube. Ahora, para celebrar el 50 aniversario del infame incidente, el metraje original fue restaurado y escaneado por expertos en 4K.
El video incluye la icónica línea de cierre de Linnman: «Se podría concluir que si una ballena alguna vez llegara a la costa nuevamente, los que están a cargo no solo recordarán qué hacer, sino que, ciertamente, recordarán lo que no deben hacer».
