Los Premios Pulitzer se entregaron este lunes a organizaciones de noticias que descubrieron casos de malversación fraude en el pasado financiero del presidente Donald Trump, un gesto de aprobación dedicado a la perseverancia de los periodistas ante los ataques cada vez más agudos del mandatario estadounidense contra la prensa libre.
The New York Times recibió el premio de reportaje explicativo por una investigación de 18 meses que reveló cómo el republicano y sus familiares evadieron aproximadamente unos 500 millones de dólares en impuestos, antes de su mandato.
The Wall Street Journal, por su parte, ganó el premio nacional de reportaje por revelar pagos clandestinos a dos mujeres de las que se dijo que habían tenido aventuras con Trump en los meses anteriores a la elección presidencial de 2016.
Amenazas contra periodistas, extranjeros y estadounidenses, le proporcionaron un telón de fondo a los Pulitzer de este año, que también reconocieron a reporteros que se vieron obligados a cubrir tragedias mortales en sus ciudades natales y, en un caso, en su propia redacción.
La revista del Times compartió el premio de Escritura Especial junto a la periodista de ProPublica Hannah Dreier, por capturar la difícil situación de los inmigrantes salvadoreños capturados en una campaña federal contra integrantes de la pandilla MS-13 en Long Island, en el estado de Nueva York.
The South Florida Sun Sentinel ganó el Premio por servicio público, considerado el más prestigioso de los Pulitzer, por documentar la masacre en la escuela secundaria Marjory Douglas de Parkland, en Florida. Los profundos artículos del periódico revelaron una serie de fallas cometidas por autoridades locales y fuerzas policiales que, el diario reportó, le costaron la vida a varios niños.
The Pittsburgh Post-Gazette ganó por su cobertura de última hora del ataque de un hombre armado en la sinagoga El Árbol de la Vida.
El comité del Pulitzer también reconoció a The Capital Gazette de Annapolis, en Maryland, donde cinco trabajadores fueron asesinados en un tiroteo en junio, con una mención especial que incluyó un legado de 100 mil dólares. Dana Canedy, la administradora de los Premios Pulitzer, destacó «el compromiso inquebrantable de cubrir las noticias en un momento de dolor innombrable».
Apelando al asesinato de Jamal Khashoggi, el columnista del Washington Post ultimado en Turquía por agentes saudíes, Canedy alabó a los periodistas premiados este año por su voluntad de hablar con la verdad ante el poder. «Los trabajos ganadores de este año reflejan nuevamente la firme decisión de defender los principios de esta noble profesión», expresó.
En honor de The Sun Sentinel, The Post-Gazette and The Capital Gazette, el comité del Pulitzer remarcó la importancia del periodismo local en un momento en que los periódicos regionales luchaban por sobrevivir. Los premios, entregados por primera vez en 1917, son presentados anualmente por la Universidad de Columbia a la excelencia en el periodismo y las letras.
La investigación del Times sobre las finanzas de la familia Trump, realizado por los periodistas David Barstow, Susanne Craig y Russ Buettner, se basó en decenas de miles de páginas de registros confidenciales y declaraciones de impuestos no reveladas previamente. El premio de este año fue el cuarto Pulitzer de Barstow.
El Times también ganó el premio por Redacción Editorial, por los ensayos de Brent Staples, un miembro del Comité Editorial del periódico desde 1990, que examinó el concepto de raza y memoria en comunidades de Texas y Nueva York.
Investigación sobre inmigrantes salvadoreños
La revista del Times compartió el premio de Escritura Especial junto a la periodista de ProPublica Hannah Dreier, por capturar la difícil situación de los inmigrantes salvadoreños capturados en una campaña federal contra integrantes de la pandilla MS-13 en Long Island, en el estado de Nueva York.
Otros de los ganadores de este año fueron Wa Lone y Kyaw Soe Oo, dos periodistas de Reuters que se encontraban encarcelados por más de un año en Myanmar. Sus reportajes, sobre la represión militar y las violaciones a los derechos humanos contra los musulmanes Rohingya en el sureste de la nación asiática, compartieron el premio por periodismo internacional. La cobertura de la Associated Press sobre las atrocidades en Yemen también fue reconocida.
Los premios de fotografía fueron para Reuters, en la categoría última hora, por la narrativa visual de la travesía de los migrantes rumbo al norte, a la frontera de los Estados Unidos; y para Lorenzo Tugnoli, del Washington Post, por documentar la devastadora hambruna en Yemen.
Carlos Lozada, el crítico de libros del Washington Post, ganó el premio de Crítica. Tony Messenger, del St. Louis Post-Dispatch, recibió el premio de Opinión por sus columnas sobre los problemas de los habitantes de Missouri, que se enfrentan a multas exorbitantes por ofensas menores.
The Los Angeles Times, después de un periodo brusco de cambios de propiedad y de inquietud en su redacción, recibió el premio por Reportaje de investigación después de revelar acusaciones generalizadas de abuso sexual por parte de un ginecólogo de la Universidad del Sur de California. El trabajo, de Matt Hamilton, Harriet Ryan y Paul Pringle, fue una de las causas por las que el presidente de la Universidad renunció.
The Advocate, un diario de Baton Rouge, en Louisiana, recibió el premio por reportaje local tras examinar el sistema criminal de justicia del estado, incluida una ley que afectaba desproporcionadamente a los afroamericanos.