La Copa de Asia llegó a su fin el viernes con la victoria de Qatar sobre Japón en la final. Aunque se fueron con un mal sabor de boca tras no lograr el objetivo, la selección nipona ha mostrado sus buenas maneras. En una imagen que ha compartido la Federación Asiática en Twitter, se puede ver cómo dejaron el vestuario tras el partido.
Todo estaba recogido, impecable, ni una botella ni nada por el suelo. Además, escribieron un mensaje de agradecimiento en una de las pizarras del vestuario. «Gracias» se puede leer en tres idiomas (inglés, japonés y árabe).
Este hecho ha dado la vuelta al mundo. No suele ser habitual ver así un vestuario después de cualquier partido, de la parte del mundo que sea o de la categoría que sea. No es la primera vez que Japón da muestras de su buena educación. En su último partido del Mundial de Rusia ante Bélgica, también dejaron el vestuario impoluto. Y eso que perdieron en el último minuto…
https://twitter.com/afcasiancup/status/1091621041397485568?ref_src=twsrc%5Etfw%7Ctwcamp%5Etweetembed%7Ctwterm%5E1091621041397485568&ref_url=https%3A%2F%2Fas.com%2Ffutbol%2F2019%2F02%2F02%2Finternacional%2F1549102564_083832.html
Yo le llamaría disciplina, de que la mayoría de personas no tiene en su casa.
Igual a los salvadoreños. Ni una gota de miados, ni un vaso plastico, nada de basura dejamos cuando visitamos un lugar.
MIS FELICITACIONES A JAPÓN, SI EL MUNDO TUVIERA ESA EDUCACIÓN, FUERAMOS UN MUNDO MÁS HUMANO, MÁS RESPETUOSO, AÚN EN LAS DERROTAS. TOMEMOS EL EJEMPLO SALVADOREÑOS, NOSOTROS PODEMOS. PERO LOS LÍDERES SOLO ENSEÑAN ODIO, VAMOS PROFESORES, ESO SE APRENDE DESDE LA NIÑEZ, EN LA FAMILIA, EN LA ESCUELA Y EN LA SOCIEDAD.
ellos son limpios, pero si hubiera sido la selección mediocre del salvador hubieran dejado todas las pulgas que cargan con ellos, jajajajjaja
EJEMPLO DE EDUCACION Y DE UN PUEBLO QUE HA SUFRIDO DOS BOMBAS ATOMICAS Y QUE HOY SE MIRA COMO ESTA SUPERANDO EN TODOS LOS DEPORTES QUE EJEMPLO PARA EL MUNDO.
Igual que el.pueblo salvadoreño, limpios, honestos, pulcros, educados, caballeros y descentes