Este lunes los medios españoles e italianos amanecieron con la noticia de que Kevin-Prince Boateng se convertirá en el nuevo refuerzo del Barcelona. El futbolista que supo brillar en el Milan, vestirá la camiseta azulgrana durante los próximos seis meses e intentará lograr su mayor anelo: ganar la Champions League.
En una entrevista publicada por Marca en 2016, cuando el ghanés vestía la camiseta de UD Las Palmas, hizo un repaso por su carrera en el que reconoció cuáles fueron sus errores que lo llevaron a convertirse en un futbolista «rebelde».
Según él mismo contó, su infancia rodeada de miseria y su inmediato salto a la fama como deportista de élite, provocaron un descontrol en su vida: «De un día a otro tienes tanto dinero que puedes comprarlo todo. En dos años me gasté todo mi dinero en coches, relojes, botas, discotecas, restaurantes y amigos que en realidad no lo eran. Para un chico como yo, que ha crecido en un barrio pobre y sin dinero, era peligroso».
Boateng se crió en la pobreza y careció de contención familiar: «Fue difícil crecer allí. Mi madre no tenía mucho dinero y mi padre nunca estaba en casa. No tenía la posibilidad de jugar como otros niños. Para mí era normal porque no me comparaba con nadie. En mi barrio era normal vivir así».
El centrocampista llegó a la primera del Hertha de Berlín en 2005 y tras sus buenas actuaciones fue transferido en 2007 al Tottenham. Su calidad era indiscutible, pero su actitud hizo que comience un periplo por varias escuadras en poco tiempo. Así, vistió las camisetas del Borussia Dortmund, Portsmouth F. C. y A. C. Milan, en donde arribó en 2010 y se encontró su mejor nivel.
«Después del Mundial de 2010. Vi a jugadores de otro nivel y pensé que tenía que concentrarme sólo en el fútbol para llegar a ese nivel. Tenía la mente en otras cosas que no eran importantes. Ahí decidí cambiar mi mentalidad», explicó.
El volante que tiene capacidad goleadora, ha reconocido que le encanta La Liga, en donde jugó una temporada con la camiseta de UD Las Palmas y marcó 10 goles. Además, en ese período pudo enfrentar a -según él-los dos mejores jugadores de la actualidad.
«Cristiano lo tiene todo. Tiene derecha, izquierda, cabeza, velocidad… Bueno, en este planeta Cristiano Ronaldo. Leo Messi no es humano, es de otra galaxia», soltó en aquella entrevista.
Con respecto a su cambio de juego, explicó que hoy en día se enfoca más en lo grupal: «Antes no trabajaba con las personas. Me daba igual la relación con mis compañeros. Ahora la cuido más. Es un trabajo de todos los días y es importante tratar con respetos a todos».
Ahora, el joven que tiene de ídolo a Muhammad Ali y de referente a Nelson Mandela tendrá la oportunidad única de lucir la camiseta del Barcelona, explotar todo su potencial y tal vez conquistar la Champions League, trofeo ausente en su vitrina personal.