Ahora que se ha anunciado el live action de la cinta «El Rey León», trascendió que un activista de Zimbabaue exige que la empresa estadounidense The Walt Disney Company renuncie a la patente de la frase que se hizo popular en los noventas «Hakuna Matata», que en suajili quiere decir «No hay problema».
El organizador de la petición que se popularizó a través de Change.org se llama Shelton Mpala y la hizo para poder disuadir de que se elimine el registro legal de esta frase, al ser considerada como parte de la cultura sudafricana. «Muchos de los hablantes de suajili se han sorprendido por completo, no tenían idea de que esto estaba sucediendo. Al crecer en Zimbabaue, siempre entendí que el lenguaje de una cultura era su riqueza», señaló el activista a la BBC.
La petición ya cuenta con más de 153.000 firmas en la que se dice que «a Disney no se le puede permitir patentar algo que no inventó», sobre todo cuando se trata de una frase que es tan común y cotidiana que utilizan «la mayoría de los países de habla suajili como Tanzania, Kenia, Uganda, Ruanda, Burundi, Mozambique y la República Democrática del Congo».
Disney aplicó por primera vez a la marca registrada del eslogan en 1994, el mismo año en que lanzó la animación de El Rey León, pero la patente se realizó hasta el 2003.
«Si bien respetamos a Disney como una institución de entretenimiento responsable de crear muchos de nuestros recuerdos de la infancia, la decisión de patentar «Hakuna Matata» se basa exclusivamente en la codicia y es un insulto no solo al espíritu del pueblo suajili sino también a África en general», reza la petición, que califica de «robo» la acción de Disney.
Esta solicitud coloca a Disney como una empresa de corte colonialista ya que la franquicia no sólo incluye la frase sino un escenario musical con el que se ha lucradoen objetos como camisetas, juguetes, computadoras, secuelas y precuelas de la cinta.
El tema ha sido retomado por varios medios africanos e incluso algunos medios en Kenia han acusado a Disney de robarse la cultura keniana. Hasta el momento, la empresa estadounidense no ha emitido ningún comunicado ante esta situación.
Si bien Mpala no habla suajili, cree que la marca comercial es simplemente el ejemplo más reciente de África «explotada de alguna forma, moda o forma».
La noticia también ha acaparado las redes sociales en la que muchos de los firmantes se encontraron inconformes en que Disney haya hecho de una frase popular una patente.
«¿Cómo pueden hacer una marcar de una frase que se ha utilizado como parte del lenguaje?» se lee en redes, «Este es un robo flagrante que no debe permitirse que se mantenga en pie. No se tiene que hablar el idioma para saber que se trata de un robo atroz, que recuerda la forma en que fueron saqueados los preciosos tesoros de África.Por favor firme esta petición!», reza un tuit.
Mientras otras personas lo ven como una oportunidad que las empresas africanas podrían haber capitalizado mucho antes de que Disney realizara los trámites para obtener los derechos.
«Ni siquiera es colonial, es una falta de autoafirmación y creencia en nuestro propio pueblo. Disney vio una oportunidad que nosotros no», dice otro internauta.