El presidente Nayib Bukele afirmó que El Salvador siempre fue un país subdesarrollado, pero señaló que el lugar más peligroso, abandonado y golpeado del país durante décadas fue el Centro Histórico de San Salvador.
De acuerdo con el mandatario, esta emblemática zona de la capital fue devastada por una combinación de factores históricos, entre ellos los terremotos, la guerra civil, años de desorden urbano y más de tres décadas de control de pandillas, lo que provocó el desplazamiento del verdadero centro de la ciudad y el abandono progresivo del área.
Bukele explicó que el nombre de “Centro Histórico” surgió precisamente porque el núcleo económico y social de la ciudad se movió hacia otros sectores, dejando este espacio a su suerte, sin inversión ni planificación, y marcado por la inseguridad.
“El rescate de esta zona es mucho más caro y difícil que desarrollar una nueva área desde cero”, afirmó el presidente, al subrayar que la recuperación del Centro Histórico representa un reto mayor por su carga histórica, social y estructural.
Sin embargo, destacó que lograr su transformación constituye una prueba clara e innegable del renacimiento de El Salvador, al convertir un símbolo del abandono en un espacio recuperado para las familias, el turismo y la actividad cultural y económica del país.




