El Salvador dio el pasado jueves 15 de noviembre un paso clave para la modernización y reactivación de su sector ganadero con la firma de un acuerdo de cooperación entre el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y The Beef Initiative, una organización estadounidense especializada en producción bovina, genética ganadera y seguridad alimentaria. El convenio fue suscrito por el viceministro Óscar Domínguez y por Texas Slim, fundador de la iniciativa y reconocido ganadero del estado de Texas, en el marco de Bitcoin Histórico desarrollado del 12 y 13 de noviembre de 2025.
El acuerdo establece líneas de trabajo enfocadas en fortalecer las capacidades de los productores salvadoreños mediante formación técnica, intercambio de experiencias y capacitación especializada. Entre las prioridades se incluyen prácticas de reproducción bovina, manejo genético y estrategias de sostenibilidad orientadas a elevar la productividad y rentabilidad del hato nacional.
La apuesta central es reactivar la producción de carne y posicionar a El Salvador como referente regional en el uso de genética bovina de alta calidad y pureza. Este esfuerzo forma parte de los proyectos del Gobierno del presidente Nayib Byukele para incrementar la autosuficiencia alimentaria y promover un sector agropecuario más competitivo.
Durante la firma del convenio, Texas Slim destacó que la colaboración abre una oportunidad estratégica para construir un nuevo modelo de seguridad alimentaria desde la base misma del sector bovino. Señaló que The Beef Initiative nació hace más de seis años en Estados Unidos y que ahora llega al país para compartir conocimientos acumulados en la construcción de ranchos y manejo de ganado bajo un estándar vinculado al ecosistema bitcoin.
Explicó que en Estados Unidos han desarrollado un modelo descentralizado de producción cárnica que busca recuperar el control sobre la cadena alimentaria. Según dijo, esta metodología permite regenerar la tierra y transformar el ganado en un producto más descentralizado, un sistema de seguridad alimentaria que, según afirmó, ha perdido vitalidad en su país. «Ahora El Salvador y Texas pueden liderar un nuevo camino», aseguró.
Sobre el convenio, subrayó que la apuesta principal es reconstruir la infraestructura alimentaria del país desde la genética. «Cuando construyes seguridad alimentaria basada en ganado, comienzas con la genética del suelo y con la genética de la vaca. Hoy estamos aquí para firmar un acuerdo de cooperación que permita crear un programa de razas bovinas patrimoniales para El Salvador», expresó.
El proyecto incluye asesoría técnica, transferencia de conocimientos, estudios genéticos y un plan por fases para desarrollar una nueva base ganadera adaptada a la cultura y a las condiciones productivas del territorio salvadoreño. «Traemos conocimiento, educación y herramientas para que El Salvador pueda construir su propio rancho nacional. Creamos una receta que inicia como un programa pequeño, se convierte en campaña y luego en un proyecto para toda la nación», afirmó.
Texas Slim aseguró que los beneficios del programa llegarán directamente a la población, al permitir que el país recupere acceso a su propia producción cárnica.












