Durante una reunión sostenida este lunes 14 de abril en la Oficina Oval, el Presidente Nayib Bukele, y su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, abordaron el polémico caso de Kilmar Ábrego García, un salvadoreño vinculado a la pandilla MS-13, quien fue deportado desde Estados Unidos y actualmente permanece recluido en el CECOT (Centro de Confinamiento del Terrorismo).
El tema fue introducido por Trump ante su equipo, incluyendo a la fiscal general Pam Bondi y al subjefe de gabinete Stephen Miller, quienes ofrecieron contexto legal sobre la situación. Bondi explicó que Ábrego había sido declarado miembro de MS-13 por dos jueces de inmigración en 2019 y que su permanencia en Estados Unidos era ilegal. “Ahora mismo, es El Salvador quien debe decidir si lo devuelve. Nosotros no podemos forzarlos”, afirmó.
Miller, por su parte, detalló que una orden de deportación válida había sido revertida temporalmente por un juez de distrito, pero que la Corte Suprema de EE.UU. anuló esa decisión en un fallo unánime de 9-0, determinando que solo el gobierno salvadoreño podía decidir sobre el destino del pandillero. “Ninguna versión legal de este caso termina con él viviendo en Estados Unidos”, puntualizó.
Cuando los periodistas preguntaron directamente al presidente Bukele si planeaba devolver a Ábrego García a EE.UU., su respuesta fue tajante: “¿Cómo puedo devolver a un terrorista a los Estados Unidos? No tengo ese poder. Sí, puedo mantenerlo en El Salvador, pero no lo voy a liberar”.
El Jefe de Estado salvadoreño reiteró el compromiso de su gobierno con la seguridad nacional y defendió su política de mano dura contra el crimen organizado: “Acabamos de dejar de ser la capital más violenta del mundo para convertirnos en el país más seguro del hemisferio occidental. ¿Quieren que volvamos a liberar criminales para ser otra vez la capital de los homicidios? Eso no va a suceder”.
Esta discusión reafirmó la sintonía entre ambos líderes en temas de seguridad, con un fuerte mensaje de cooperación bilateral y tolerancia cero hacia estructuras criminales transnacionales como MS-13.