El presidente de Argentina, Javier Milei, afirmó que su Gobierno podría reducir la edad mínima de imputabilidad penal hasta los 10 años, en un cambio radical que generó un amplio debate en el país. En una entrevista, Milei defendió su iniciativa de bajar el umbral actual de 16 a 13 años, pero incluso sugirió que la edad podría reducirse aún más.
«También la podríamos llevar a diez, porque hay países en el mundo que está en diez», declaró el mandatario, haciendo referencia a legislaciones internacionales que establecen una imputabilidad más baja para los menores de edad.
En Argentina, el Régimen Penal de la Minoridad establece que los menores de 16 años no pueden ser juzgados. Solo aquellos entre 16 y 18 años pueden enfrentar un proceso penal en casos de delitos de acción pública o con penas mayores a dos años. Sin embargo, no pueden cumplir condena en una cárcel hasta cumplir la mayoría de edad, permaneciendo en centros especializados para menores.
La propuesta de Milei tiene similitudes con la reforma impulsada en El Salvador por el presidente Nayib Bukele, aprobada el 31 de marzo de 2024, en el que se establecieron penas de hasta 10 años de prisión para menores de 12 a 15 años y de hasta 20 años para los de 16 a 18, cuando estén vinculados a maras o pandillas.
Además, el pasado 12 de febrero, la Asamblea Legislativa de El Salvador aprobó una serie de reformas penales, entre las que fue incluida que los menores de edad detenidos provisionalmente o por pena de privación por delitos cometidos de crimen organizado, sean enviados a penales comunes, en áreas separadas de los adultos.