Angelina Jolie revela que su icónico papel en ‘Tomb Raider’ la obligó a dejar de fumar y a cambiar su rutina física.
La actriz de 49 años se convirtió en la favorita de millones de fans tras protagonizar a la aventurera Lara Croft en la película de 2001, que recaudó 274.7 millones de dólares en todo el mundo, convirtiéndose en una de las adaptaciones de videojuegos más taquilleras.
Angelina participó en una sesión de preguntas y respuestas con el célebre crítico Leonard Maltin, en el Festival Internacional de Cine de Santa Bárbara (California), donde recibió el prestigioso premio Maltin Modern Master, y reveló que cambió su físico para el papel de acción y que a su vez la empujó a hacer cambios drásticos en su estilo de vida.
Sobre su preparación dijo: «Admito que llegué fumando dos paquetes al día y tuve que cambiar por completo mi salud y mi vida y descubrir que podía hacer cosas que no sabía que podía hacer».
Angelina, conocida por sus fieras interpretaciones y su labor humanitaria, también recordó cómo ‘Tomb Raider’ «lo cambiaría todo» para ella, no sólo en términos de su carrera, sino también en su vida personal.
Durante los meses previos al rodaje, se centró intensamente en el entrenamiento, una experiencia que la llevó mucho más allá de sus hábitos habituales.
Continúa: «Para ‘Tomb Raider’ fueron unos meses de nada más que múltiples sesiones de entrenamiento al día: mañana, tarde y noche. Llegó un momento en que sólo quería comer bien, beber agua y dormir».
Su rigurosa rutina acabó ayudándola a dejar de fumar para siempre, añadió.
Angelina señaló: «Estaba entrenando y eso es lo que tu cuerpo quiere… cambias».
Al reflexionar sobre los efectos a largo plazo de su transformación, dijo sobre el tabaco: «Nunca volví a hacerlo… bueno, creo que lo hice una o dos veces».
Angelina es madre de seis hijos: Maddox, de 23 años, Pax, de 21, Zahara, de 20, Shiloh, de 18, y los gemelos Knox Léon y Vivienne Marcheline, de 16, con su ex marido Brad Pitt, de 61 años.
