Un equipo de expertos trabaja para esclarecer las causas de los incendios que han arrasado extensas áreas de Los Ángeles en los últimos días. Según informó NBC News, los investigadores enfrentan un proceso complejo que podría extenderse durante semanas o meses. Entre los siniestros más relevantes se encuentran el Palisades fire y el Eaton fire, ambos bajo escrutinio detallado para determinar sus orígenes.
El incendio de Palisades, iniciado el pasado martes cerca del sendero Temescal Ridge, ha sido objeto de un análisis minucioso. Las autoridades han descartado causas naturales como rayos, debido a la ausencia de tormentas recientes en la región. Tampoco se han encontrado líneas eléctricas o transformadores cercanos al área donde comenzó el fuego, eliminando otra posible fuente de ignición. La hipótesis principal apunta a la intervención humana, aunque no necesariamente intencional, según el medio.
Por su parte, el incendio de Eaton, declarado también el pasado martes por la noche al este de Altadena, muestra un panorama distinto. La presencia de líneas de transmisión de alta tensión en la zona ha llevado a los expertos a investigar si el fuego fue causado por el contacto entre cables bajo condiciones de fuertes vientos. Este tipo de incidentes, conocidos por generar partículas de metal fundido capaces de encender terrenos secos, se han registrado en incendios previos en California.
La posibilidad de incendios provocados: hipótesis de incendiarios en discusión
La teoría de que los incendios fueron provocados intencionalmente ha generado debate entre especialistas. Según NBC News, en el caso del Palisades fire, es poco probable que un incendiario sea responsable, debido a la dificultad de acceso al lugar donde comenzó el fuego. Rick Crawford, exjefe de batallón del Departamento de Bomberos de Los Ángeles, indicó: “Los pirómanos generalmente no se adentran 150 metros fuera de un sendero a través de árboles y arbustos para iniciar un incendio y luego huir”.
Sin embargo, los expertos no descartan que algunos incendios menores registrados tras el incendio de Palisades puedan haber sido intencionales. Terry Taylor, un investigador retirado de incendios forestales, señaló que los eventos de gran magnitud a veces inspiran imitadores. Aunque este fenómeno ocurre ocasionalmente, la confirmación de que un fuego fue provocado deliberadamente requiere investigaciones extensas y detalladas.
En el caso del Eaton fire, las condiciones ambientales apuntan más a un accidente relacionado con las líneas eléctricas. Ed Nordskog, un detective retirado del Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles, explicó que en situaciones de viento y sequedad extrema es común que partículas de metal encendido provoquen incendios. A pesar de ello, no se descarta la posibilidad de otras causas humanas, como el uso de vehículos o equipos.
Meticuloso trabajo de campo: cómo se investiga el origen de un incendio
El proceso para determinar el origen de un incendio involucra procedimientos exhaustivos. Según NBC News, los investigadores comienzan identificando el punto exacto de inicio del fuego mediante patrones de quemado y restos carbonizados. Una vez delimitado el área, se establece una cuadrícula para analizar centímetro a centímetro en busca de pistas, como huellas, fragmentos de metal o materiales que puedan ser indicios clave.
En el caso del incendio de Eaton, los investigadores están utilizando imanes para localizar partículas metálicas posiblemente generadas por líneas eléctricas. Sin embargo, el hallazgo de dichas partículas no garantiza que sean la causa definitiva. Como explicó Nordskog, “todavía tienes que determinar si la chispa de las líneas eléctricas ocurrió porque ya había algo en llamas o si fue lo que inició el fuego”.
La complejidad del análisis significa que estos procesos pueden prolongarse durante meses, especialmente cuando hay múltiples hipótesis a considerar. Este nivel de detalle refleja la dificultad inherente a identificar las causas de los incendios forestales.
Causas humanas: negligencia y accidentes como factores principales
El análisis histórico refuerza la idea de que la mayoría de los incendios forestales en Los Ángeles tienen un origen humano. Según John Abatzoglou, profesor de climatología de la Universidad de California, Merced, más del 95% de los incendios en el condado de Los Ángeles entre 1992 y 2020 fueron causados por actividades humanas. Entre las causas más comunes destacan los accidentes con vehículos y equipos, mientras que los incendios intencionales representan una fracción menor.
Este contexto subraya la importancia de diferenciar entre incendios provocados por negligencia, accidentes o actos deliberados. Cuando se identifica la participación humana, los investigadores deben determinar si el incidente constituye un acto criminal o un accidente inevitable. Este análisis resulta crucial para establecer responsabilidades y prevenir futuros siniestros.
Colaboración interagencial: un equipo élite para la investigación
Para enfrentar la magnitud del desafío, un grupo de trabajo conformado por agencias locales y federales lidera la investigación. Según NBC News, participan el Departamento de Bomberos de Los Ángeles, el Departamento de Policía de Los Ángeles, el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles, Cal Fire y la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF). El sheriff del condado, Robert Luna, aseguró que “todo está sobre la mesa”, en referencia a las posibles causas.
Con un saldo de al menos 16 víctimas mortales y daños significativos en la región, los esfuerzos para esclarecer las causas de los incendios continúan. Las autoridades han destacado la experiencia y dedicación del equipo encargado de la investigación, que tiene como objetivo final brindar respuestas claras y precisas.