Miles de seguidores del exmandatario Evo Morales marcharon este martes (29.10.2024) para pedir la renuncia del presidente de Bolivia, Luis Arce, en una protesta realizada en uno de los puentes que mantienen bloqueados en el centro del país.
Entre consignas y el estallido de petardos de dinamita, las personas agricultoras y obreras completaron 16 días de protestas al grito de «¡Que renuncie! ¡Que renuncie!». La manifestación se llevó a cabo sobre el puente bloqueado de Parotani, un sector clave en Bolivia que comunica el departamento de Cochabamba con La Paz.
Las protestas comenzaron con el objetivo de reclamar el «cese de la persecución judicial» contra Morales, investigado por un presunto abuso de una niña en 2015 cuando era presidente. Sin embargo, ahora exigen una solución a la crisis económica, causada por la escasez de combustibles y divisas.
«Le hemos dado cuatro años al Gobierno para que recupere la economía del país. Sin embargo, ha traicionado al pueblo que lo ha llevado» a la Presidencia, dijo Aquilardo Caricari, dirigente cocalero de la región conocida como Trópico de Cochabamba, en un mitin al término de la marcha.
Mientras los choques entre policías y manifestantes se concentraron este martes en Mairana -en el vecino departamento de Santa Cruz, donde hubo 30 personas heridas- en Parotani, el bloqueo se consolida ante la ausencia de la fuerza pública.
«Hasta que renuncie (Arce) va a estar movilizado este pueblo. Si no renuncia, no nos importa pasar todos los días calor, frío o lluvia», aseguró Constancio Vallejos, un agricultor de 37 años del Trópico de Cochabamba.
Morales se disputa con su exministro Arce la candidatura presidencial del oficialismo para las elecciones de 2025 y ha acusado al Gobierno de buscar «proscribirlo» a través de la apertura de investigaciones penales.
El líder cocalero denunció el 27 de octubre un supuesto atentado contra su vida cuando se trasladaba en un vehículo por Cochabamba. «Este Gobierno quiere acabar con la vida de nuestro líder (Evo Morales) y eso no lo vamos a permitir», afirmó Juanita Ancieta, dirigente de Central de Mujeres Campesinas Bartolina Sisa.