Thibaut Courtois estará de baja en torno a tres semanas tras lesionarse el abductor de la pierna izquierda durante el empate a uno entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid del domingo, según fuentes informaron a ESPN.
El parón por selecciones de octubre ayudará en cierto sentido a la recuperación del portero blanco ya que las fuentes apuntan a que el belga se perderá el partido del sábado contra el Villarreal pero podría volver para el encuentro contra el Celta en Balaídos que se jugará el 19 de octubre.
Las fuentes añaden a que el Clásico no peligra y el portero estará seguro para la visita del Barcelona al Santiago Bernabéu del próximo 26 de octubre. “Tras las pruebas realizadas hoy a nuestro jugador Thibaut Courtois por los Servicios Médicos del Real Madrid se le ha diagnosticado una lesión en el abductor de la pierna izquierda. Pendiente de evolución”, publicó el Real Madrid en su web oficial.
Courtois se lesionó en la segunda parte del partido frente al Atlético de Madrid. Tras agotar los cambios Carlo Ancelotti, el belga tuvo que aguantar el resto del partido lesionado. De hecho, dos lances demuestran que Courtois no estaba al 100%. Fede Valverde tuvo que sacar de puerta por él y, minutos más tarde, prefirió sacar en largo con la mano antes que arriesgarse a hacerlo con el pie.
En la noche del domingo ESPN ya informó que Courtois temía una pequeña rotura, confirmada en la mañana del lunes por los médicos del Real Madrid. Las fuentes consultadas destacan que el portero no tendrá problemas en llegar a tiempo al Clásico contra el FC Barcelona y que, incluso, lo normal es llegar a tiempo al partido contra el Celta de Vigo que se jugará en Balaídos siete días antes.
Thibaut Courtois, además, protagonizó un enfrentamiento con la grada del Metropolitano tras el gol de Militao, a lo que un sector de la grada respondió con el lanzamiento de numerosos objetos entre los que se encontraban encendedores, vappers y bocadillos. El partido se tuvo que detener por espacio de diez minutos tras la aplicación del protocolo de LaLiga en estos casos.
Fuentes cercanas al jugador comentan a ESPN que no quieren darle más recorrido al incidente insistiendo en que el jugador lleva muchos años siendo el objetivo del mismo sector de la afición colchonera porque no le perdonan haber fichado por el eterno rival.