El actor de 30 años estuvo casado con la megaestrella del pop, de 42 años, de 2022 a 2023, y solicitó el divorcio dos meses después de que saliera a la venta el libro de memorias de la intérprete, ‘The Woman In Me’.
Sin embargo, el actor y modelo no sintió interés en leer el libro, en el que Britney se refería a él como un «regalo de Dios».
Así lo dijo a la nueva edición de The Hollywood Reporter: «No leí el libro porque estaba con ella».
Refiriéndose a un acuerdo de confidencialidad que habría firmado, añadió: «Si mi vida es privada, es privada. Eso es algo que siempre voy a respetar, independientemente de cualquier acuerdo o no. Son los valores que tengo».
El libro ha sido adaptado para una biopic, por lo que Sam también ha dicho recientemente que no se «involucrará» en la producción.
Universal Pictures obtuvo los derechos para adaptar el libro a la gran pantalla y el modelo ha dado el visto bueno al proyecto, pero no quiere protagonizarlo.
Durante un encuentro con Access Hollywood, indicó: «No me involucro en los proyectos de otras personas creativamente, pero creo que muchos de los productores de la cinta van a hacer justicia a este increíble legado de Britney».
Cuando la estrella de ‘Jackpot’ y Britney iniciaron su relación, la intérprete de ‘…Baby One More Time’ se encontraba bajo una tutela que otorgaba a su familia inmediata el control de su multimillonaria fortuna y de varios aspectos de su vida, y finalmente fue rescindida menos de un año antes de que se casara con Sam.
Sus padres no asistieron a la ceremonia, y en su lugar, la lista de invitados estaba formada por estrellas de la talla de Madonna, Selena Gómez y Paris Hilton.
A pesar de que el matrimonio duró poco más de un año, Sam insistió en que sólo quiere «lo mejor» para su ex esposa.
Así lo aseguró a E! News: «Aprendes mucho de las relaciones en general. Aprecio todas las experiencias increíbles que he tenido.
Siempre voy a celebrar el pasado, aprender de él y avanzar hacia el futuro. Le deseo lo mejor. Es una persona increíble y una gran parte de mi vida y siempre aprecio los momentos que pasamos juntos».
Hace poco se supo que la próxima película biográfica podría rodarse en la casa en la que Britney creció en Kentwood, Luisiana, antes de saltar a la fama a finales de los noventa.
El propietario de la casa -que la puso a la venta el año pasado por 1.2 millones de dólares- también está «dispuesto a abandonar la vivienda durante el tiempo que sea necesario para el rodaje», pero espera recibir una compensación económica.
