El presidente de Panamá, José Mulino, anunció este jueves que impondrá un toque de queda en dos zonas del país para «limpiar» las calles de la delincuencia, y además ordenó una depuración en los aeropuertos para hacer frente al narcotráfico.
El toque de queda que impide el libre desplazamiento de la población regirá de «nueve de la noche a cinco o seis de la mañana» en la provincia caribeña de Colón y en el populoso distrito de San Miguelito, contiguo a la capital panameña, dijo.
«Deseo que exista el toque de queda en esos dos lugares porque son quizás las zonas más afectadas por este tema de pandillas. El narcotráfico modificó toda la estructura delictiva», indicó el mandatario en su conferencia de prensa semanal.
Mulino no precisó la fecha en que entrará en vigencia esta medida.
En las últimas semanas han sido detenidas en Panamá decenas de personas, entre ellas policías y el hijo de un diputado, por su presunta relación con pandillas o el tráfico de drogas.
Según las autoridades, estas bandas trafican drogas y blanquean dinero procedente del narcotráfico. Además, la mayoría de homicidios en el país están relacionados con estas asociaciones criminales.
Aeropuerto Tocumen es una «terminal caliente»
El mandatario también anunció una «depuración» en los aeropuertos, incluido Tocumen, el principal del país y un centro regional de conexiones, al que tildó de «terminal caliente», como parte de la lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico.
Mulino instruyó al Servicio Nacional Aeronaval (Senan) para que «intensifique el patrullaje en costas» y para que «tome la seguridad de todos los puertos del país, Tocumen incluido».
«El Senan tendrá a su cargo la seguridad de los aeropuertos mientras depuramos esas terminales de transporte, sobre todo en las áreas de carga en lo que a Tocumen respecta, que es la terminal caliente, y los que me escuchan saben por qué lo digo», afirmó el presidente panameño sin más precisiones.
La seguridad en el Aeropuerto Internacional de Tocumen está actualmente a cargo de la Policía Nacional, del Senan y de agentes de la propia terminal.
Mulino, quien asumió el cargo el 1 de julio pasado para el quinquenio 2024-2029, afirmó que el Senan «tomará el control en los próximos días de la seguridad aeroportuaria del país».
«Trabajaremos duro con ellos (el Senan) para limpiar esas estructuras y le he pedido a la directora de Aduanas que haga lo propio en las entradas del país (…) y que refuerce los puntos de entrada incluyendo los puertos privados», añadió.
Panamá es utilizado como puente de la droga que se produce en Suramérica y que tiene como destino principal EE.UU., el mayor consumidor de cocaína del mundo, y también Europa.
Halo no se escucha a la oposición de nuestro país.
Solo falta para complementar que los EEUU y Europa hagan lo de ellos depurando su personal, porque por alli entran las drogas, si ellos hacen un esfuerzo todo sera un exito.