Unos tres millones de panameños están convocados a las urnas este domingo para elegir entre ocho candidatos presidenciales con la corrupción, la migración, la falta de recursos hídricos y el cierre de una gran mina de cobre como principales puntos de campaña.
Los panameños también escogerán a su vicepresidente, 20 diputados al Parlamento Centroamericano (PARLACEN), 71 diputados a la Asamblea Nacional (AN), 81 alcaldes, 701 representantes de corregimiento y 11 concejales.
En el último momento y en medio de una gran expectación, la Corte Suprema de Justicia consideró el viernes por mayoría que «no es inconstitucional» la decisión tomada por el Tribunal Electoral (TE) en marzo para designar como candidato presidencial a José Raúl Mulino, favorito en los sondeos.
Los que tienen más chance de llegar a la presidencia de Panamá
Mulino, de 64 años, es sustituto del inhabilitado expresidente Ricardo Martinelli (2009-2014), de quien fue candidato a vicepresidente por los partidos Realizando Metas (RM) y el Partido Alianza (PA).
Pero Martinelli fue inhabilitado por el TE tras ser condenado a casi 11 años de prisión por lavado de dinero y solicitó asilo en la Embajada de Nicaragua. El tribunal autorizó entonces a Mulino a reemplazar al exjefe de Estado como candidato. El político propone un programa de inversión en obras de infraestructuras para impulsar la economía.
Otros candidatos con buenas papeletas es Rómulo Roux, 58 años, de la alianza de Cambio Democrático (CD) y el Partido Panameñista (PPa), y que fue ministro para Asuntos del Canal y canciller en el gobierno de Martinelli.
Roux, que llegó segundo en los comicios de 2019, se ha visto salpicado por su vinculación con uno de los bufetes involucrado en la firma del primer contrato de la mina de cobre Minera Panamá, filial de la canadiense First Quantum Minerals (FQM), y que generó masivas protestas. Este candidato promete generar medio millón de empleos.
Entre los favoritos también figura el abogado Ricardo Lombana, de 50 años, del partido Movimiento Otro Camino (Moca), que quedó en tercer lugar en las anteriores elecciones como independiente. Su discurso durante la campaña ha estado marcado por la lucha contra la corrupción y se identifica con el Gobierno de Nayib Bukele, en El Salvador.
En esta carrera por la presidencia también figura Martín Torrijos (2004-2009), de 60 años e hijo del fallecido general Omar Torrijos, autor del golpe de 1968 y que negoció con Washington la entrega del Canal a Panamá. Las propuestas, que se presenta con el Partido Popular (PP), se basan en el desarrollo económico, la generación de trabajo y la eficiencia del Estado.
Además, por la centroizquierda del Partido Revolucionario Democrático (PRD) concurre José Gabriel Carrizo, actual vicepresidente del país; mientras que Melitón Arrocha, Maribel Gordón y Zulay Rodríguez son aspirantes independientes.
El que gane la presidencia a de Panamá tendrá que tratar temas polémicos como la sequía que afecta el canal de Panamá, problemas fiscales, déficit sistema de pensiones y el problema de El Darién, entre otros.