En uno de los partidos correspondientes a la Fecha 35 de la Serie B de Italia sucedió un hecho inédito en la historia del fútbol: se reanudó el juego cuando faltaba el arquero de uno de los equipos. La situación ocurrió tras el entretiempo del juego que enfrentó a Parma y Lecco en el estadio Ennio Tardini, donde casi 28 mil espectadores observaron lo insólito.
El árbitro Daniele Rutella no se percató de que si bien los futbolistas visitantes ya habían saltado al campo y estaban en sus respectivas posiciones preparados para el reinicio, el portero Riccardo Melgrati todavía no había salido del vestuario. El juez dio el pitazo y, a los pocos segundos, frenó la acción y el primer ataque de un Parma que ya ganaba 3-0 e iba a comenzar la ofensiva sin un golero enfrente.
“¿Qué pasó? ¿Por qué detuvo las acciones Rutella? ¿Se le tildó el reloj? ¿Hay alguien en la cancha?”, fueron las primeras apreciaciones del relator, que tampoco comprendía qué era lo que hacía demorar la reanudación del encuentro en el que los Cruzados se impusieron 4-0 por los tantos del español Adrian Bernabe García (doblete), el rumano Valentin Mihaila y el marfileño Drissa Cámara. Además, para los de Emilia-Romaña fueron titulares los argentinos Leandro Chichizola y Nahuel Estévez.
En el instante en que las cámaras tomaron a Melgrati corriendo hacia su arco y colocándose los guantes, el relator exclamó: “Ah, no, faltaba un detalle. El arquero. Bueno, esto es lo último, esto no lo vi nunca. O sea, salieron a jugar con 10. ¿Qué estaba en el baño Melgrati?”. Las teorías junto al comentarista fueron diversas: desde que estaba durmiendo una siesta hasta que estaba al teléfono o enviando mensajes.
Lo cierto es que Parma consiguió una contundente victoria en casa que lo mantiene a un paso de consagrarse campeón y sellar su retorno a la Serie A. Los dirigidos por Fabio Pecchia acumulan 73 puntos contra los 68 del Como y los 67 del Venezia, los únicos que le pueden discutir el título (restan solamente tres jornadas). El próximo miércoles podría cumplir su cometido cuando visite al Bari, equipo que figura en zona de descenso, mientras que sus otros dos compromisos serán frente a Cremonese (4°) en casa y cerrará en su visita a Reggiana (13°).
Con este insólito descuido, los muchachos del Lecco demostraron por qué son el peor equipo de la categoría y ya se registró su descenso