Inter Miami no defraudó ante su público en el arranque de la MLS. El equipo dirigido por el Tata Martino se encargó de inaugurar una nueva temporada en la MLS, y lo hizo ganando de forma contundente a un Real Salt Lake que venía de dar guerra en los últimos playoffs del pasado curso.
La gran labor en ambos lados del campo devolvió la confianza a un equipo que había presentado dudas durante su periodo de pretemporada, donde solo habían conseguido ganar uno de los siete partidos disputados. Ante un gran revuelo generado por las dudas y las numerosas críticas hacia el rendimiento del equipo, los jugadores han respondido de la mejor forma posible.
La veteranía de los grandes líderes del equipo y la incipiente necesidad de regular los esfuerzos y minutos de los jugadores más veteranos seguramente empañaron resultados durante toda la pretemporada. Ahora, tras un solo partido oficial, parece haberse visto mucho de lo que Inter Miami puede ofrecer en pro de pelear por todos los títulos de este año 2024.
Equipo balanceado y con ‘estrella’
Este Inter Miami parece cimentarse sobre una serie de jugadores de mucha calidad y de un criterio táctico y técnico a la altura de muy pocos dentro del fútbol estadounidense. No en vano, los grandes líderes del equipo son jugadores como Messi, Busquets, Suárez o Jordi Alba, auténticos especialistas en gestionar encuentros en los que su equipo domina.
En el ámbito defensivo, la idea es clara: defenderse con el balón, o lo que es lo mismo, protegerse con la posesión. Es fundamental para el equipo el conseguir posesiones muy largas donde el balón se mueva de lado a lado, con el fin de desgastar al equipo rival y evitar así transiciones rápidas cuando ocurra una pérdida de balón. También es clave llevar en todas las jugadas el balón muy lejos del área, para así obligar al resto de equipos a construir siempre desde muy lejos de la zona de peligro.
En el ataque, el equipo goza de más alternativas y jugadores capaces de determinar un partido. Si bien parece claro que la incidencia de Leo Messi va a ser un factor diferencial durante todo el curso, el olfato goleador de Luis Suárez, la clase de Robert Taylor, Y la aparición de actores secundarios de mucho talento y con un hambre voraz parecen ser más que suficiente para que el equipo siga en una dinámica ganadora que los mantenga como el gran favorito a ganarlo todo.