El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha instado a Hamás a llegar «rápidamente» a un acuerdo con Israel que facilite el intercambio de rehenes y presos, con el fin de evitar una «catástrofe» en Rafah.
Según informa la agencia de noticias WAFA, Mahmud Abbas, que representa a una facción política rival de Hamás y es la máxima autoridad en Cisjordania, llamó el miércoles (14.2.2024) a evitar «otra catástrofe con siniestras consecuencias, no menos peligrosa que la ‘Nakba’ de 1948». Abbas aludía de esta manera a la ‘catástrofe’ con la que los palestinos recuerdan la ola masiva de refugiados derivada de la creación del Estado de Israel.
A medida que Israel ataca el sur de la Franja y pretende alcanzar Rafah, el único punto en el extremo sur de Gaza que no ha tomado a nivel terrestre, los temores a una masacre y a la evacuación de los más de 1,4 millones de palestinos hacinados allí -en gran medida desplazados internos- han ido aumentando, mientras Naciones Unidas o EE.UU. o Egipto presionan al Gobierno israelí para que no dé tal paso. También lo ha pedido Abbas, instando a que se prevenga «el ataque de la ocupación a Rafah, que provocará miles de víctimas, sufrimiento y desplazamiento» para el pueblo palestino.
Llamado a facilitar un acuerdo
En un mensaje dirigido a la población, el presidente de la Autoridad Palestina cree que «es momento de que todo el mundo asuma sus responsabilidades». Abbas ha criticado a todo aquel que pueda poner «obstáculos» en las negociaciones que habría actualmente en marcha.
Además, dijo que esperaba que los Gobiernos de Estados Unidos y de los países árabes faciliten este posible acuerdo y ayuden a los civiles a evitar «el azote de esta guerra devastadora», con vistas a que se pueda seguir avanzando hacia el reconocimiento de un Estado palestino «independiente» y la plena integración de Palestina en el sistema de Naciones Unidas.
La influencia de Abbas en el proceso de mediación entre Israel y Hamás es casi nula, no actúa como interlocutor ni tiene control directo sobre Gaza, donde Hamás echó del poder a la ANP en 2007, tras un enfrentamiento interno con el partido secular Fatah del propio Abbas.