El Viceministerio de Transporte (VMT) instaló un cerco antodoping en la ciudad de Santa Ana, donde se efectuaron 927 pruebas de alcoholemia y se sacó de circulación a 23 conductores, quienes deberán enfrentar un proceso penal por el delito de conducción peligrosa.
El director de Tránsito explicó que, en caso de que una persona se niegue a hacerse la prueba de alcoholemia, se establece que hay una presunción de delito de conducción peligrosa. Como parte del proceso, las autoridades levantan un acta de negativa y la persona es trasladada a Medicina Legal para que le practiquen las pruebas físicas correspondientes.
A pocas semanas de que finalice el año, las autoridades gubernamentales han intensificado los controles en carreteras para sacar de circulación a conductores peligrosos y evitar accidentes.
El Gobierno insta a la población a ser responsables al momento de conducir un vehículo, pues las normas de tránsito son claras. Los equipos de la Policía Nacional Civil y del Viceministerio de Transporte, permanecerán en las carreteras en diferentes puntos del país para garantizar que se cumpla con el reglamento y garantizar la protección de las familias salvadoreñas.
“En este último trimestre del año intensificamos los controles, porque sabemos que hay un incremento en el número de conductores en estado de ebriedad; evitemos normalizar estas conductas”, reiteró el director de Tránsito.
no entiendo porque el VMT, no pone una ley fuerte de $600 por la multa y una suspencion de licencia de un año la primera vez, la segunda $800 con un año y medio de suspencion y compañado de programas sociales y asi lo pensaran dos veces