El rapero Kanye West ha vuelto al centro del debate tras varios meses de silencio, en parte por el veto que le fue impuesto en la red social X, la antigua Twitter, por una serie de comentarios que incitaban a la violencia y la discriminación. Tras salir a la luz, hace escasos días, que finalmente se había casado legalmente con su novia, Bianca Censori, ahora el rapero ha decidido aclarar de una vez por todas cualquier duda sobre su estado mental y, asimismo, sobre su actual relación con Kim Kardashian.
Lo cierto es que el exmarido de la estrella televisiva ha pedido a su amigo Ian Connor, un conocido modelo y estilista, que comparta en su cuenta de Instagram los mensajes de texto que Kanye envió en su momento a Elon Musk, director gerente de Tesla y dueño de X, a raíz de la comentada suspensión de su entonces perfil de Twitter. En ellos, el rapero asegura que no padece un trastorno bipolar, al contrario de lo que reveló en 2018, y que en realidad es una persona con autismo. Su intención pasaba por poner en el debido contexto ese comportamiento agresivo y errático del que había hecho gala en público.
Hay que recordar que, en una de sus últimas peroratas de Twitter, las que eventualmente le llevaron a ser temporalmente expulsado de la plataforma, el artista se lamentaba del «diagnóstico erróneo» en que habían incurrido los psiquiatras respecto de su supuesta bipolaridad. «Casi ahogo mi mente con tanta medicación, para convertirme en una celebridad manejable y educada», escribía en esa época. Esa afirmación parece verse corroborada ahora en esos mensajes a Musk, en los que le pide una conversación en profundidad para solventar sus diferencias.
«No me debes nada, no tienes por qué hablar conmigo, pero si al final lo hacemos, he de decirte que la naturaleza de nuestra relación ha cambiado. No soy bipolar, tengo signos que indican autismo desde mi accidente de tráfico», sostiene en referencia al llamativo percance que sufrió en 2022. Tras estrellar su vehículo, Kanye se fracturó la mandíbula y tuvo que ser operado de urgencia para que le fuera instalada una placa.
En sus mensajes a Elon Musk, el astro de la música también se reafirma en su teoría de que Kim no le dejaba ver a sus cuatro retoños -North, Saint, Chicago y Psalm-, pese a que la celebridad ya había precisado que esa afirmación no era del todo cierta. Kim simplemente le había pedido que no se presentara en su casa sin previo aviso y, por tanto, que respetara los términos de su separación. Sea como fuere, Kanye finaliza su cadena de mensajes para el empresario con un duro reproche: «Fingías ser mi amigo para atraer a todo mi público a tu maltrecha plataforma», le afea.
