El trabajo de prevención contra las enfermedades transmitidas por zancudos, que realiza el Gobierno en distintas zonas del país, mantiene a El Salvador con tres años sin registrar muertes por dengue y con una tendencia a la baja en los casos confirmados.
La información contenida en el Boletín Epidemiológico del Ministerio de Salud de El Salvador, en el apartado de la semana 35 acerca de la situación del dengue en el país, es alentador al confirmar una baja de 33 casos confirmados este año al compararlo con similar periodo en 2022.
Este año se contabilizan 24 pacientes confirmados con dengue, mientras que el año pasado hubo 57.
El Sistema de Salud mantiene el desarrollo constante de jornadas de la salud en las comunidades, entre las acciones de los promotores de salud están la entrega de abate, eliminación de criaderos de zancudos, fumigaciones masivas, entre otras.
Todas esas acciones han sido claves para evitar que más personas enfermen de dengue, zika o chikungunya, enfermedades que en años atrás causaron centenares de muertes.
En el referido informe de Salud se indica que el grupo etario más afectado es entre 10 y 19 años. Aunque los casos confirmados son pocos.
Durante tres años, las autoridades del Ministerio de Salud no han registrado el fallecimiento de un paciente a causa de dengue en el país, una tendencia que se ha sostenido como producto de las acciones directas en las comunidades y la colaboración de la población que hace su parte en sus casas.
A diferencia de países de la región donde los pacientes por dengue se han elevado, El Salvador se encuentra en la Zona de Éxito.
