The Walt Disney Company es uno de los conglomerados de entretenimiento más grandes de todo el mundo, un líder que por largo tiempo ha lanzado los productos más conocidos del cine y la televisión, llegando a ser marca distintiva respecto al poder ejercido por Estados Unidos sobre el mundo, al menos en temas recreativos. Pero aunque los años recientes han sido especialmente buenos para sus ejecutivos con tantas adquisiciones y franquicias, nueva información sostiene que Apple podría comprar parte de la compañía en el futuro, cambiando para siempre un poco de la esencia misma que ha venido desarrollando en las décadas de 2010 y 2020.
Fundada en 1923 por Walt Disney y su hermano Roy O. Disney, esta empresa ha evolucionado de ser un estudio de animación pionero en la creación de cortometrajes y luego largometrajes animados, convirtiéndose en un imperio global del entretenimiento. Los años permitieron a Disney ampliar sus actividades para incluir televisión, parques temáticos, productos de consumo y medios de comunicación, adquiriendo franquicias como Pixar, Marvel y Lucasfilm. Esta expansión ha consolidado a Disney como jefe en la industria, con éxitos como la creación de Disneyland, el lanzamiento de películas como El Rey León , la apertura de parques en todo el mundo y la introducción de plataformas de streaming como Disney+, asegurando su influencia continua en la cultura pop de todo el mundo.
Disney, ¿un gigante irremediablemente destinado a la fragmentación?
Pero aunque Disney es grandiosa y multimillonaria, The Hollywood Reporter presenta el testimonio anónimo de un veterano ejecutivo de la industria de cine en Estados Unidos, quien sostiene que en los próximos años podríamos ver una transacción relativamente inesperada: Apple comprando Disney. Hace pocas semanas, Bob Iger, CEO de la compañía, reveló para CNBC que ABC y FX no son el centro de atención para la mesa directiva, lo cual es rescatado por la fuente de THR; sostiene los altos mandos de Disney comienzan perder interés en algunos activos, lo cual sería indicativo de una posible venta; es aquí cuando entra Apple:
No creo que [Apple] compre la compañía tal como existe actualmente. Pero si ve que Bob [Iger] comienza a desinvertir en cosas… se siente como si se estuviera preparando para una venta. Y claramente no hay un comprador como Apple
The Walt Disney Company podría estar cerca de vender algunas de sus propiedades, cambiando para siempre algunas dinámicas entre conglomerados. Recordemos que Steve Jobs y Bob Iger, ambos influyentes líderes en el mundo del entretenimiento y la tecnología, mantuvieron una sólida relación a través de colaboraciones empresariales y una asociación estratégica. Como CEO de Disney, Iger trabajó en equipo con Steve Jobs cuando Disney adquirió Pixar en 2006, donde Jobs era miembro importante. Esta adquisición no sólo consolidó la posición de Disney en la industria de la animación, sino que también estableció una relación cercana entre los dos líderes. Crearon metas como la distribución de contenido de Disney a través de la plataforma iTunes de Apple, entre otras. Aunque su relación estaba principalmente centrada en los negocios, esta asociación influyó en la intersección entre el entretenimiento y la tecnología, dejando una marca duradera en ambas industrias.
Teniendo en cuenta su pasado, y el hecho de que Apple es en la actualidad una de las compañías más ricas de Estados Unidos y el mundo, no sería raro imaginar la venta de algunas de las propiedades más importantes de Disney. The Hollywood Reporter rescata la declaración de otro veterano anónimo de Hollywood, quien afirma lo siguiente:
Terminará habiendo tres o cuatro plataformas y todos los demás serán vaciados y adquiridos. Habrá Apple, Amazon, Netflix y algún otro. Si pudieran juntar NBCUniversal, Warners y Paramount, probablemente tendría suficiente para sobrevivir.
El multimillonario negocio del cine y la televisión en Estados Unidos es un ecosistema de gran magnitud que abarca producción, distribución y exhibición de contenido audiovisual. Los estudios producen películas que se estrenan en cines a nivel global y posteriormente se distribuyen en diversas plataformas, incluyendo televisión, streaming y formatos físicos. Los ingresos provienen de taquilla, acuerdos de licencia, publicidad y ventas de contenido, alimentando una cadena de valor que involucra a productores, directores, actores, guionistas y una gama de profesionales creativos y técnicos. Pero esta enorme bestia está en constante cambio y los próximos años podrían ser decisivos para las empresas más importantes.
